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Punta Umbría

Bilbao acoge el primer monográfico a gran escala de Kapoor en España

El Museo Guggenheim Bilbao inaugura hoy la primera exposición monográfica a gran escala dedicada en España al escultor de origen indio Anish Kapoor, que ha colaborado de manera estrecha en la instalación de las veinte obras de la muestra en el edificio diseñado por Frank Gehry.

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  • El escultor Anish Kapoor posa ante su obra titulada ?Amarillo, 1999?. -
El Museo Guggenheim Bilbao inaugura hoy la primera exposición monográfica a gran escala dedicada en España al escultor de origen indio Anish Kapoor, que ha colaborado de manera estrecha en la instalación de las veinte obras de la muestra en el edificio diseñado por Frank Gehry.

Según explicó el artista, la exposición se articula en torno a varios ejes, como el color, el espacio y el vacío, los reflejos en espejos y los objetos “autogenerados”.

La serie 1.000 nombres (1979-80), la más temprana que se presenta en Bilbao, se compone de obras realizadas con pigmento en polvo aplicado a formas geométricas que parecen surgir de las paredes y el suelo, dando lugar “a la ficción de que esos objetos han estado siempre allí, que se han autogenerado”.

El escultor, residente en Gran Bretaña desde los años setenta, ha descrito estas creaciones como “icebergs que salen del suelo: la mayor parte del objeto no está en la sala”, señaló Kapoor, en cuyas obras el “espacio de los objetos” es una parte sustancial.

El autor otorga gran importancia al color –en esta serie predominan el rojo y el amarillo–, ya que éste “no es sólo lo que es, es más: es un espacio para los sueños”, explicó.

Tras esta etapa de finales de los setenta y principios de los ochenta, el escultor inició un nuevo periodo en el que introdujo en sus obras el concepto del vacío, para lo que recurrió al azul muy oscuro y al negro.

En Bilbao se podrán ver Adán (1988-89) y Sin título (1990), en las que Kapoor excava en los objetos y pinta su interior con colores oscuros, creando la ilusión de que las esculturas no han sido vaciadas. “Parece que, vaciando la forma, de algún modo el espacio no se vaciara, más bien es como si se llenara”, afirmó Kapoor y añadió que para él fue “un gran descubrimiento que vaciar era llenar, y que lo que lo llenaba era una especie de oscuridad”.

En su interés por profundizar en el espacio y en su relación con el espectador, Kapoor creó Poniendo el mundo del revés. Oro (2009) en la que las superficies cóncavas de los espejos de acero inoxidable invierten y distorsionan los reflejos de los visitantes.

“Esto es un nuevo tipo de espacio: el objeto del cuadro está más allá del cuadro, pero por delante de él”, dijo el artista, que ha añadido: “No hago arte para el público. Lo hago porque hay que hacerlo”.

No obstante, matizó que su obra tiene muy presente la existencia de un “observador filosófico”, que es “una fuerza vital que hace que la obra sea completa”.

La muestra del Guggenheim, organizada junto con la Royal Academy of Arts de Londres, también incluye las obras Yellow (1999), una pieza monumental en la que un gran hueco se hunde en una pared amarilla, o Mi patria roja (2003), un paisaje rojo con un aspa de metal que remueve veinticinco toneladas de cera roja.

Disparos en el cañón (2008-09) ocupa toda una sala del museo de Bilbao y consta de un cañón que dispara proyectiles de cera roja contra una esquina en la que se acumulan los restos de cera.

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