Se trata de una desición de Rafael España que ha estado madurando a lo largo de los dos últimos años y que no responde a ninguna lógica electoral. Incluso a España le costó encontrar el candidato alternativo ya que de inicio barajó los nombres de Diego Sánchez Rull e Isabel Beneroso; desechados finalmente al estar ya demasiados desgastados políticamente. Todo el socialismo, tanto a nivel local como regional, sabe que el candidato ideal para el PSOE actualmente en Algeciras es Tomás Herrera.
Un alcalde que casi rozó la mayoría en las pasadas elecciones municipales, que también consiguió la victoria en las posteriores europeas, y que ha conseguido durante su actual legislatura sobrellevar de manera bastante satisfactoria la crisis económica, sin apenas tener grandes problemas locales. Salvó el escollo del catastrazo con un ejemplar consenso con las asociaciones vecinales. Además, Tomás Herrera tiene todo el apoyo de la ejecutiva reginal socialista y del presidente de la Junta, José Antonio Griñán, de forma personal.
Del mismo modo, tanto Rafael Velasco, vicesecretario general de la ejecutiva regional; al igual que Susana Díaz, secretaria de organización, han mandado por activa y por pasiva mensajes a Rafael España de que Herrera debería ser el candidato. El PSOE ha recordado que los alcaldes que han ganado elecciones los deben poner y quitar los propios electores en las urnas. De ahí que no se entiende el empecinamiento de Rafael España por presentar otro candidato distinto a Herrera; defenestrado de inicio por España por no pertenecer a su círculo de allegados.
Distintos clanes
La única motivación que se presume en esta arriesgada decisión es la lucha de poder entre los distintos clanes dentro del PSOE gaditano y regional. En este sentido, Rafael España le echa un pulso al actual presidente José Antonio Griñán porque sabe que puede tener los apoyos de cabezas de cartel como Francisco González Cabaña o Luis Pizarro, entre otros. Lo cierto es que hoy puede comenzar la primera gran batalla dentro del PSOE. A los doce de la mañana está citada la ejecutiva local algecireña en la sede del partido para votar afirmativamente la decisión que presente Rafael España. En este sentido, la ejecutiva local socialista ha sido conformada por el propio España con sus allegados más cercanos, por lo que no tendrá ningún problema para que acate su decisión, sea la que sea.
Sin acuerdos de última hora
En los últimos días las distintas facciones del PSOE local y regional han intentado llegar a un consenso de última hora para evitar iniciar esta lucha que se presume suicida de cara a las elecciones municipales. Por un lado, la posibilidad de que Tomás Herrera tirara la toalla y llegara a un acuerdo para dejar el camino libre a Angelines Ortiz ha sido desechada de inicio por el propio alcalde. Del mismo modo, España ha intentado que Sevilla también se doblegue a sus deseos y le confirme que acatará su decisión. Sevilla, por ahora, también le ha dicho que no.
En la otra vertiente, también Sevilla ha presionado a Rafael España para que desista de su actitud y nombre a Herrera candidato. España también se ha negado de inicio; e incluso corre peligro su posición como actual subdelegado en el Campo de Gibraltar de la Junta de Andalucía. No obstante, cualquier acuerdo se puede producir en las últimas horas.
Plazos a partir de hoy
Si finalmente no hay un acuerdo de última hora y España presenta hoy a Angelines Ortiz como candidata la decisión final estará en manos de la ejecutiva regional y posteriormente nacional que deberán ratificarla antes del 1 de octubre, fecha donde el PSOE presentará oficialmente a todos los candidatos a alcalde en ciudades de más de 50.000 habitantes. Antes, a mitad de esta semana deberá primero dar el visto bueno la ejecutiva provincial donde Francisco González Cabaña tendrá que darle, si le quiere ser fiel a España, otro revés a José Antonio Griñán. Cabaña tendrá que decidir si también abre la guerra directa con el PSOE de Sevilla, en este caso si apoya la decisión de España.
El entorno de Tomás Herrera confía en que la ejecutiva regional, o bien la nacional, rechace el candidato propuesto por España y presente otro alternativo, que sería sin duda Tomás Herrera; lo que supondría lógicamente un clima irrespirable en el PSOE algecireño que debería desembocar en la dimisión de España.
Grupo de no adscritos
Por otra parte, también se ha especulado que si finalmente Tomás Herrera se quedará sin apoyos y saliera perdedor de la batalla dimitiría como alcalde y se pasaría al grupo no adscrito de la corporación municipal, incluso acompañados por algún que otro concejal. No obstante, esta posibilidad ha sido totalmente desmentida rotundamente desde fuentes cercanas al actual alcalde algecireño.
La batalla ha comenzado.
