En plena pandemia vemos actitudes nada recomendables como no usar mascarillas, no guardar la distancia de seguridad o incumplir las normas en cuando a la cifra máxima de personas que pueden reunirse. Pero todo eso queda en nada frente al caso que nos ocupa.
Un local de la estación de trenes AVE de Zaragoza estaba siendo usado para celebrar fiestas sexuales, de intercambio de parejas concretamente.
La policía nacional consiguió desmantelarlo a finales de octubre, aunque el caso no se ha conocido hasta ahora. Según fuentes policiales, los agentes sorprendieron in fraganti a un grupo de personas pasándolo en grande mientras incumplían todas las normas impuestas en una comunidad muy castigada por la pandemia de Covid-19.
El local, ubicado en el sótano de la estación de Delicias, pertenecía a una asociación, a la que se ha propuesto para sanción. Además, el local se precintó y se ha propuesto para sanción a todos los asistentes.
Todo se destapó cuando los vigilantes nocturnos de la estación avisaron a la policía de que oían música en un local. Con toque de queda impuesto, además, resultaba muy extraño esa situación en plena noche, por lo que la policía se personó en el lugar.
Según parece, en el interior del local se había instalado una barra, mesas, sofás y se habían colgado unas cortinas para simular distintas «habitaciones».
En definitiva, se incumplía el horario, el aforo, la distancia social, el uso obligatorio de mascarillas… ¡no había nada bien!
