Según han informado a Europa Press fuentes policiales, los once 'ocupas' arrojaron piedras y agua con una manguera a los agentes desplegados en la zona porque se negaban a abandonar el edificio, de tres plantas, al que además habían apuntalado las puertas para obstaculizar su entrada.
Se les atribuye alteración del orden público y resistencia y a uno de ellos, de nacionalidad francesa, atentado a agente de la autoridad, porque le dio un mordisco a uno de los policías. En la puerta había otras cinco personas, a las que se les sancionará administrativamente.
El desalojo, del que informa la prensa local, comenzó a las 10,00 horas de este miércoles, y concluyó una hora más tarde, pese a la "fuerte resistencia" que opusieron los 'ocupas', que han pasado a primera hora de este jueves a disposición judicial.