El parque canino se ha construido en una parcela de 2.600 metros cuadrados que se encontraba muy degradada y que se ha recuperado para uso y disfrute de los algecireños, ofreciendo un espacio muy demandado al que los ciudadanos puedan acudir acompañados de sus perros, y relacionarse con otras personas que compartan problemas e inquietudes.
La parcela se ha vallado en su totalidad, se ha dotado de bancos, papeleras, arbolado, fuentes, bebederos para perros, iluminación y una “pista agility” que ocupa 500 metros cuadrados y está equipada con ocho aparatos para que los perros puedan realizar ejercicio.
El parque pretende igualmente concienciar a los dueños de los perros de sus obligaciones para con sus mascotas, tanto desde el punto de vista sanitario como social, para lo que se han instalado carteles indicativos y un reglamento que incluyen diez normas de obligado cumplimiento.
El delegado de Limpieza manifestó que la iniciativa ha sido acogida con gran entusiasmo entre los vecinos de la zona, y anunció que existe la pretensión de realizar otros parques caninos en distintas zonas, entre ellas San Bernabé, San García y en las inmediaciones del cementerio.