Jerez

?Si se celebraran ahora elecciones, el PP no tendría mayoría absoluta?

Tras la celebración de la Huelga General el pasado jueves, la secretaria comarcal de CCOO, Inmaculada Ortega, valora para EL FARO la situación económi

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  • Inmaculada Ortega. -
¿Qué valoración hace de la jornada de Huelga General?
—Creemos que en el Campo de Gibraltar fue satisfactoria. La respuesta de los trabajadores en una zona que es el segundo polígono industrial más importante de España en producción industrial bruta fue del cien por cien. En sectores estratégicos como la basura, el transporte o el vertedero de Los Barrios, también fue del cien por cien. Y, como ha ocurrido en el resto del país, donde los trabajadores están menos organizados y hay más presión empresarial, como es el comercio y los servicios, la respuesta ha sido más débil. Pero ha sido muy positivo. No sólo huelga, sino que ha habido dos manifestaciones, y de las más importantes que se han celebrado en el Campo de Gibraltar, o cual indica un rechazo a la reforma laboral y a las políticas del Gobierno anterior y de este.
¿Mantenéis la postura de las centrales de continuar las protestas?
—Hay un cambio de tendencia en nuestro país contra la resignación del conjunto de los ciudadanos y tenemos una cita próxima para el 1 de mayo, pero no descartamos que antes pueda haber otro tipo de movilizaciones. Entendemos que la respuesta debe ser tan contundente como la reforma y los recortes, y vamos a seguir movilizándonos desde los centros de trabajo, con colectivos determinados, como el metal, donde hay incumplimiento del convenio, y otros sectores donde vemos un crecimiento de la conflictividad, porque la reforma laboral ha roto las reglas del juego.
¿Cuáles son los puntos exactos que denunciáis de la Reforma Laboral y que os interesa que se conozcan?
—Hay un retroceso en lo que son los derechos colectivos relacionados con la negociación colectiva. Se rompe el equilibrio en lo que son las modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo. El empresario va a poder modificar las condiciones pactadas en el convenio unilateralmente en cuanto a salarios, en cuanto a jornada laboral, en cuanto a horarios, en relación también a desplazamientos y movilidad geográfica y modificación de las movilidad funcionales. Desaparecen las categorías profesionales de los convenios colectivos. Y aquellos que no se negocien en dos años, desaparecen. Ello va a conllevar que las empresas no van a querer negociar ninguno, y van a esperar a que se extinga el periodo de dos años. Y los trabajadores irán al estatuto de los trabajadores o al convenio del sector. También se amplían y se crean nuevos contratos de trabajo, especialmente para los jóvenes, que lo llaman de fomento de contratación indefinida, que no tiene indemnización por despido, que entendemos como precarios y discriminatorios. También que se facilita el despido, ya que se amplían los supuestos para despedir por causa objetiva, introduciendo elementos perniciosos como la causa económica, con un costo de doce días para el empresario. Desaparecen los salarios de trámite, por lo que complica mucho la demanda al juzgado de lo social. También introduce un elemento pernicioso como el absentismo tope para las causas objetivas, lo que va a provocar que trabajadores enfermos tengan que acudir al centro de trabajo. También hace desaparecer el derecho a la lactancia. Hace desaparecer el derecho a la concreción horaria cuando hay reducción de la jornada. Desaparece la indemnización de 45 días por año para despidos improcedentes, pasando a 33. Hay una pérdida de derechos individuales y una reducción de los derechos colectivos.
¿Qué diferencia esta huelga de la que se presentó a Zapatero?
—Esta huelga ha tenido una mayor respuesta. Son dos reformas laborales que lo que vienen es a reducir los derechos a los trabajadores, pero en esta última el ataque ha sido mucho mayor, porque no sólo facilita el despido sino que destruye el modelo de relaciones laborales, y eso se va a notar de aquí a dos años. Pero tienen en común que las dos van a destruir muchísimo empleo en nuestro país y que muchos trabajadores jóvenes se vayan de España. La de Zapatero tuvo la consecuencia del adelanto de las elecciones por la presión social y los peores resultados electorales del PSOE en su historia. Y estoy convencida de que si se celebraran elecciones ahora, el PP no tendrá la mayoría absoluta.
Se os ha criticado mucho a los sindicatos en esta huelga por no haber actuado antes con tanta firmeza...
—Nosotros llevamos haciendo huelgas y movilizaciones desde mayo de 2010. Hemos hecho manifestaciones exclusivamente en el Campo de Gibraltar. Depende de los ojos con que se mire. Es como echar la culpa a los consumidores de que suba la gasolina. Nosotros no creamos empleo, lo crean las empresas. Nosotros representamos a los trabajadores, y donde no están organizados es mucho más complejo. Es cierto que ahora hay una mayor diversificación de los trabajadores que lo hace mucho más complicado.
¿Qué medidas proponéis frente a las dos anteriores reformas laborales?
—Hemos presentado una propuesta de ley con un millón y medio de firmas al Parlamento, que ni se ha tramitado ni se ha votado. Proponemos una reforma estructural de nuestro modelo, que creemos que puede propiciar la generación de empleo y que conlleva unas políticas activas de empleo para hacer frente a la crisis. Es necesario controlar el fraude que existe y la economía sumergida, que se da más en unas zonas que en otras. Eso requiere incrementar la actuación de la Inspección de Trabajo. Eso haría que saliera a flote un montón de empleo que está sumergido. También es necesaria una modificación de nuestro modelo de producción, con actuaciones y políticas concretas para el desarrollo de la economía. En el Campo de Gibraltar se debería propiciar la instalación de empresas auxiliares mediante liberación de suelo industrial para ese tipo de empresas y bonificaciones y una política de incentivos a ese tipo de empresas. Necesitamos empresas de transformación de nuestro sector primario, que es un tipo de economía que no está explotando absolutamente nada. Y el sector turístico. También entendemos que es necesario que el Consejo Económico y Social se reúna y funcione, porque no se pone el valor.

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