Huelva

Entre ‘Fandangos y fosfoyesos’

Isaías Griñolo presenta el lunes una película en la que recopila “la lucha de la gente de Huelva que ha dicho no a la contaminación química”

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El fandango. Palo del flamenco más onubense que ningún otro, que, como todos los cantes de la tierra, expresan el sentir y la identidad de Huelva y sus gentes. Los fosfoyesos. Subproducto blanco del yeso procedente de la producción industrial de ácido fosfórico, que en Huelva se ha convertido en basura industrial química  depositada en las marismas, y que, a lo largo de 40 años de actividad de Fertiberia, han logrado ocupar un espacio más grande que la propia ciudad: Más de 100 millones toneladas en unas 1.200 hectáreas de terreno.
   Fandango, una de las identidades culturales de Huelva. Fosfoyesos, una de las identidades tristemente paisajísticas de la capital y su entorno. “Y además los dos empiezan por F”, completa Isaías Griñolo, artista onubense (Bonares) especialmente implicado con los movimientos sociales y las asociaciones, y que este lunes presenta en Huelva el proyecto ‘Fandangos y Fosfoyesos’. Lo hace en el contexto de las Jornadas ‘Huelva, este es tu momento. Nuevo modelo de ciudad’, que, con la colaboración de la Universidad de Huelva y Viva Huelva, organiza la Mesa de la Ría de Huelva, y que se celebrará en el Campus de La Merced del 8 al 12 de octubre.
   Griñolo dará una pequeña charla de presentación el lunes 8 a las seis de la tarde, antes de dar paso al contenido principal de su proyecto. Se trata de una película de unos 50 minutos de duración en la que este artista onubense realiza, según él mismo explica, “una recopilación de muchísimos materiales que resume la lucha de la gente de Huelva que ha dicho y dice no a la contaminación química. Es como un retrato desde 1964 hasta nuestros días, un resumen de la lucha de todos los onubenses que han dicho no a este modelo químico”. El documental está dividido en cinco núcleos temáticos, abiertos y cerrados cada uno de ellos por un fandango, y cuenta con un recital de poemas de Jorge Riechmann, Antonio Orihuela e Isabel Pérez Montalván.
   La película se proyectará de manera continua desde el lunes 8 hasta el jueves 11 en La Merced, y como preámbulo a la película, Griñolo colgará en la antesala del salón de proyecciones un total de 18 fotografías que muestran parte de la actividad y las secuelas que lleva a cabo la industria química en Huelva. Para este artista, “el punto común entre el Franquismo y la Democracia en Huelva es la pasividad existente ante la brutal contaminación que hay en el aire y en las puertas de Huelva”.

Un artista incómodo para el poder
Con ‘Mercado energético puro’, colección que formaba parte de la exposición colectiva ‘Principio potosí’, Isaías Griñolo expuso en el Museo Reina Sofía de Madrid de mayo a septiembre de 2010, con la visita de más de 154.000 personas,  y después llegó con esa obra a la Casa de la Cultura de los Pueblos de Berlín y La Paz, capital de Bolivia. Al finalizar esa gira, Mesa de la Ría solicitó a la Delegación de Cultura de la Junta exponer la obra de Griñolo en el Museo Provincial: “Nunca recibí respuesta”. Después, con la exposición ya montada en la sala de exposiciones de Cajasol en Sevilla, “las presiones de Aiqbe obligaron a desmontarla y no pude exponer tampoco allí”.
   Ahora, con ‘Fandangos y Fosfoyesos’, Isaías Griñolo, un artista incómodo para los poderes establecidos en Huelva y su entorno, llega a la capital onubense, con una serie de contenidos que no dejarán indiferente a nadie, y que, cuanto menos, abrirán el debate. Porque reflexión, como fandangos y fosfoyesos, también lleva la letra F.

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