Un trabajo sobre la prevalencia del síndrome metabólico en pacientes diagnosticados de trastorno mental grave realizado por enfermeras internas residentes de Salud Mental y profesionales de la Unidad de Rehabilitación de Salud Mental del Hospital Carlos Haya ha sido premiado en el 30 Congreso de la Asociación Nacional de Enfermería de Salud Mental, celebrado recientemente en Sevilla.
El estudio fue realizado el pasado año a 67 pacientes (42 hombres y 25 mujeres) de la Unidad de Rehabilitación de Salud Mental del Hospital Civil, con edades que oscilaban entre los 29 y 67 años. A todos ellos se les pasó un cuestionario sobre hábitos de vida e ingesta de fármacos, completándose el estudio con la realización de una analítica, toma de tensión arterial y pruebas antropométricas, talla, peso y perímetro abdominal.
Los resultados han mostrado que la prevalencia del síndrome metabólico entre la población estudiada es similar a la de la población general (23,1%), en concreto un 23,9 por ciento (28% en mujeres y 21,4% en hombres).
Se denomina síndrome metabólico a la presencia de, al menos, tres de estos factores de riesgo: hipertensión arterial, niveles elevados en sangre de glucosa o de lípidos y obesidad abdominal, que en un mismo individuo aumentan la probabilidad de sufrir una enfermedad cardiovascular.
El estilo de vida y los hábitos de alimentación influyen de forma muy directa en la aparición de estos factores de riesgo, por lo que, desde etapas muy tempranas de la vida, se estimula el fomento del ejercicio físico y la incorporación de hábitos de alimentación saludables como forma de paliar este riesgo.
En los últimos cinco años la Unidad de Rehabilitación de Salud Mental ha desarrollado con sus pacientes diferentes programas de intervención que incorporan la actividad física y la dieta mediterránea, entre otros aspectos, con el objetivo de mejorar o reducir aquellos componentes de riesgo.
Los programas potencian un estilo de vida saludable a través de talleres de educación sanitaria que fomentan hábitos alimentarios, abandono de sustancias nocivas (tabaco, alcohol y drogas) y refuerzo de actividades al aire libre, programas de ejercicio físico y autoestima.
