Huelva

Dos guarderías de Cartaya no han iniciado el curso con normalidad

‘Patitos’, en El Rompido, aún no ha empezado y ‘Fresita’, en Cartaya, sólo lo ha podido hacer a medio gas

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
  • Guardería de El Rompido -

Algunos padres están ya desesperados. Y es que casi un mes después del inicio oficial del curso para todos los centros de educación infantil (CEI) de la provincia, la guardería Patitos I de El Rompido (nombre que tuvo hasta el curso pasado), aún no ha podido abrir sus puertas y unos 40 menores de 0 a 3 años siguen por tanto sin poder asistir a clase.

Según ha relatado a VIVA Susana Pérez, en nombre de las cuarenta familias afectadas, la situación es insostenible para muchas, que no pueden compatibilizar su actividad laboral con el cuidado de sus hijos, “al no tener donde dejar a sus hijos en el horario de trabajo”. Sin ir más lejos, en su caso concreto asegura haber tenido que matricular a su pequeño de forma provisional en un centro privado de la capital provincial, donde tiene su centro de trabajo, para poder compatibilizar su vida laboral y familiar, con los gastos extra que ello le está suponiendo. Otras soluciones pasan por matricular a los niños en otras guarderías de Cartaya o Nuevo Portil, con los gastos en desplazamiento que ello supone para las familias, y con el riesgo de la falta de plazas en muchas de ellas a estas alturas del curso.

La situación viene dada porque, tras las reiteradas denuncias realizadas por los propios padres contra el anterior concesionario “por su mala gestión, falta de acuerdo con las familias en muchos aspectos y abusos de carácter económico”, se ha logrado por fin que la administración autonómica le retire la concesión. Por consiguiente, la tramitación de una nueva concesión, y la burocracia que ello conlleva, está retrasando la apertura del centro infantil.

Según detalla Pérez, “las madres hicimos un escrito acompañado de un pliego de firmas, que presentamos ante la Junta de Andalucía y que finalmente surtió efecto con la retirada de la concesión”. Tras este paso, decidieron hacerse cargo del centro sus propias trabajadoras, “que lo acondicionaron todo, pintaron, y han gestionado la solicitud de la nueva concesión, cuya tramitación está resultando muy lenta, siendo los principales perjudicados de todo esto las familias”.

También en Cartaya
El centro de El Rompido no es el único que presenta problemas este año en Cartaya con motivo del arranque de curso. Y es que según han señalado a VIVA varias madres, la guardería Fresita, ubicada en el recinto ferial de Cartaya, tampoco ha iniciado aún el curso con normalidad, “con los perjuicios que ello conlleva para muchas familias”. En principio -lamentan- en lugar de iniciar el curso el 2 de septiembre, por motivos que dicen desconocer, Fresita “empezó una semana más tarde”, concretamente el día 9. “Pero además -añaden- desde entonces aún no han podido los menores asistir a este centro en el horario habitual del resto de guarderías de la localidad (de 7.30 a 17.00 horas)”, encontrándose desde el arranque del curso en una especie de “periodo de adaptación” que en el resto de centros sólo dura una semana y por el que en este caso concreto el horario de asistencia está limitado de 9.00 a 13.30.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN