San Fernando

'300 pavos', algo más que aprender sin dejar de tener los pies en la tierra

Director, actor, productor... de todo en la web serie '300 pavos' que ya va por el tercer capítulo. Se lo toma como un aprendizaje para llegar a mayores cotas pero por ahora ya saborea las mieles del triunfo.

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-Diego Villalba, director, guionista, actor… de todo.
-Lo que haga falta.

-Es el alma mater de la serie '300 pavos' que está teniendo un gran éxito en las redes sociales porque además ha sido hecha para las redes sociales. ¿Cuándo empezasteis con esa aventura?

-Empezamos a mediados de 2012 cuando me encontré sin trabajo y me dije que tenía que hacer algo, que no me podía aburrir en mi casa, que iba a buscar algo que me gustara, que me pudiera recompensar de alguna manera y decidí hacer una web serie.

-Me supongo que venías ya de ese mundo, que sabías lo que era la fotografía. Tenías un aprendizaje previo.
-Yo llevaba seis o siete añitos con la fotografía, haciendo videos para Internet, para You Tube,  tenía unos cuantos seguidores… Pero no era lo mismo, tenía ganas de hacer un poco más. La gente se ríe pero se queda ahí. Quería hacer algo que la gente siguiera, una serie.

-Y salió el primer capítulo de '300 pavos'.
-Salió y tuvo mucha repercusión en Internet. No nos lo esperábamos.

-Y tanto que tuvo repercusión. Ahora mismo va por las ochenta y tantas mil reproducciones.
-Por ahí va el primer capítulo.

-¿Cuál es la dificultad principal para llevar a cabo un proyecto de este tipo? Por que al principio es a ver lo que sale, con poca responsabilidad, ¿pero cómo comenzáis a pensar en algo más serio que en cinco o seis videos en You Tube?
-Al ver que la gente estaba respondiendo bien, que había muchas visitas, muchos comentarios, a la gente le gusta… Entonces te das cuenta de que no sólo lo están viendo los cuatro subscriptores que yo tengo en You Tube, que lo está viendo más gente, que lo están esperando. Y entonces tienes que tener más cuidado, trabajarlo un poco más.

-¿Y la gente que trabaja contigo se va comprometiendo? A mí los directores de teatro aficionado siempre me dicen que lo que cuesta trabajo no es montar una obra, sino que los actores se comprometan, que vayan a todos los ensayos.

-Yo he tenido la suerte de que desde el principio he contado con gente que son amigos míos, tengan formación o no tengan y han estado igual de ilusionados que yo con el proyecto y van a seguir conmigo.

-¿Cuántas personas trabajan en cada uno de los capítulos?
-El equipo técnicos somos unos cinco o seis, no somos más. Y actores, ya en este último capítulo han sido por lo menos veinticinco.

-En el primero erais solo cuatro o cinco.
-Los que éramos, no había más. Buscamos un par de personitas de San Fernando que quisieran colaborar sin saber a lo que iban y tuvimos la suerte de que dijeron que sí.

-El segundo costó menos trabajo. Encontrar a la gente.
-Totalmente. Ya tenías algo que presentarles. Al principio iba a los sitios, les decía que quería hacer una web serie y la gente no sabía lo que era una web serie ni se esperaba que lo hiciéramos con cámaras más profesionales. Era más difícil. Luego le decíamos lo que habíamos hecho, que íbamos a seguir, que íbamos a mejorarlo…

-Que una imagen vale más que mil palabras por mucho que expliques el proyecto. Cuando se tiene ese capítulo piloto es como el piso piloto, ya sólo hay que vender el resto de la promoción. Y en el tercer capítulo habrás tenido problemas para encajar a tanta gente que quería participar…
-Me ha pasado. Al final tienes que decirle a gente que no y que se espere al siguiente capítulo porque no hay sitio. En el tercer capítulo hemos metido a veinticinco personas en media hora. Yo creo que está bastante bien.

-Y ya ha llegado gente con formación teatral, aunque algunos de vosotros sí la tienen.
-Sí. Álvaro Pérez que es uno de los protagonistas tiene hecho Arte Dramático, está haciendo varias películas y participa en otras series. Los demás no tenemos formación. Antonio Morenilla se dedica a la cinematografía de bodas, tiene mucha experiencia en cosas técnicas, con las cámaras, pero poco más.

-Pero ya hay actores con un cierto currículo.
-No sustituimos a nadie pero sí vamos añadiendo a gente. Ahora tenemos a un par de actores que tienen más experiencia, son de San Fernando y vamos a contar con ellos porque ellos quieren participar con nosotros.

-La primera vez que yo vi un capítulo lo primero que hice fue compararla con las series de televisión actuales, y no salió malparada porque hay de todo por ahí. Pero creo que lo primero que habría que explicarle a la gente es que una web serie no es una serie al uso, sino como el teatro alternativo, se sale del circuito profesional y comercial y los autores experimentan hasta dónde son capaces de llegar.

-Claro. Y además está muy bien porque no tienes ningún tipo de presión. Es una idea tuya, personal, no hay nadie apostando por ti… Trabajas muy tranquilo y gracias a eso salen cosas bastante puras, que las llamo yo, bastante buenas.

-Y es un desafío personal porque supongo –y lo digo por experiencia- que vas aprendiendo en cada capítulo, tanto en la parte técnica como en la dirección de actores, vivencias que luego se van trasladando al siguiente capítulo.
-Totalmente. Yo con cada capítulo aprendo tanto técnicamente como actuando… Es más, yo creo que 300 pavos es eso, más que nada un aprendizaje para mí, para poder llegar a otro tipo de cosas.

-¿Cómo te sentó eso de organizar una presentación con el tercer capítulo, que os dieran la sala más grande cuando seguro que pensabas que con una sala pequeñita sería suficiente y al final se llena?
-Yo vi a un par de ellos sentados en las escaleras porque no había más sitio. Fue increíble porque no me lo esperaba. A mí me preguntaron que qué sala queríamos, la chica, la grande… Y yo diciéndoles que se esperaran a ver cómo iba la venta de entradas, si la gente compraba o no… Luego vi que me las quitaban de las manos y fue increíble ver a tanta gente de San Fernando apoyándonos, que les gustaba la serie, había gente que iba sin haber visto el primero y segundo capítulo… Y se llenó.

-Y se hubiera hecho una segunda función, también.
-Yo creo que sí porque cuando quedaba media hora para empezar la proyección empezó la gente a llamarme y fue cuando la gente se enteró verdaderamente de que se estaban vendiendo las entradas. Por lo visto no hubo la suficiente promoción para llegar a todo el mundo pero media hora antes me pedían cuatro, cinco… Y yo diciendo que no tenía entradas. Si lo llego a saber hago otra proyección.

-¿Cuándo os dais cuenta de que estáis haciendo algo más grande que un simple divertimento o un experimento? Por que tengo entendido que existe un ranking a nivel nacional de las web series –que hay más de lo que parece- y estáis en el séptimo lugar.
-Eso va contando las visitas por cada semana y esta última semana el tercer capítulo se ha puesto el séptimo de entre las doscientas y pico de series que hay registradas en España. Hay una página que se llama Web Series Spain, creo, y ahí es donde viene el ranking. Me avisó un amigo de que estábamos los séptimos… y muy contento.

-¿A cuántos capítulos pensáis llegar? Lo normal en las serie comerciales son trece.
-Yo creo que vamos a hacer siete. El primero y segundo tienen un cuartito de hora cada capítulo pero a partir del tercero van a ser de media hora y el séptimo quiero que sea de una hora.

-¿Seguro que van a ser siete? Por que me supongo que cuando comenzaste el primero dirías que con tres o cuatro tenías bastante.
-Ya va a ser siete, seguro. Que hagamos una segunda temporada puede ser, depende de la gente si se ha hartado o no de nosotros.

-El hecho de que no tenga más pretensiones que las de aprender, de que la gente lo pase bien, os permite mantener el lenguaje, la forma de ser de la gente de La Isla, la localizáis mucho, que comercialmente no es bueno pero sí es bueno para la gente de aquí que se ve reflejada en ella.
-Yo más que para España lo estoy haciendo para la gente de San Fernando y si le gusta a la gente de por ahí… Pero no voy a dejar de hablar como se habla aquí en una web serie que es mi web serie, es de aquí de San Fernando, hecha con gente de San Fernando y para la gente de aquí.

-La ventaja es que no tienes ni que actuar.
-Es más, a Cuquito, por ejemplo, lo conozco desde hace tiempo, canto con él en Navidad, y estaba buscando un personaje con unas características muy parecidas a las de él. Y no tenía que buscar a un actor, sino a una persona que fuera ese personaje. Lo llamé y lo hizo genial.

-Independientemente de todo, lo que estáis haciendo y que ya lo están viendo en toda España es una especie de tarjeta de visita, de currículo para que pueda salir un proyecto ya más profesional.
-Ya que estamos aprovechamos. Yo lo he hablado muchas veces con Antonio Morenilla, que es quien graba conmigo y siempre hemos dicho lo mismo, vamos a ir aprendiendo y a donde lleguemos, llegamos. Está claro que vamos a intentar por todos los medios colarnos a hacer una película si hace falta, porque es lo que nos gusta.

-O sea, que no se trata de hacer un tipo de producto alejado de los mercados, de lo comercial, sino que estáis abierto a todo lo que llegue.
-Por supuesto. De hecho, la primera idea fue la de hacer un largometraje, pero sinceramente, no nos vimos preparados, no teníamos experiencia y hay que tener los pies en la tierra. En principio vamos a intentar aprender e ir avanzando poco a poco, que si no la caída es muy grande.

-¿Estáis teniendo apoyo de las administraciones?
-Cuando sacamos el primer capítulo, Ángel Martínez, del Ayuntamiento, nos ofreció ayuda y nos ayudaron bastante para el segundo capítulo. Nos consiguió el coche de la Policía, una joyería que no era joyería sino una floristería pero Ángel Martínez apareció con carteles para transformarla… Se portó bastante bien con nosotros.

-Hay sintonía con el Ayuntamiento, o al menos con algunos concejales.
-Sí, sí.. Y con Fran (Romero) también.

-No han llegado después cuando ya habéis comenzado a tener éxito.

-No. Desde el principio. Yo para el primer capítulo no pedí ayuda de nada ni el Ayuntamiento estaba enterado de lo que íbamos a hacer. Lo hice y a los tres días de haber sacado el primer capítulo me llamaron ofreciéndome lo que necesitara, que era mucho lo que estábamos haciendo y que era promoción de la ciudad.

-¿Cómo veis el panorama a la hora de dar el salto a un proyecto más importante? ¿Hay gente que se arriesgue por vosotros?
-Ahora las cosas están muy difíciles. Existen los crowdfunding que son proyectos de los que subes la idea a Internet, nosotros la subiríamos apoyada ya con la web serie y la gente puede apostar por ti. La idea es mostrar algo que llame la atención y por muy mal que esté la cosa, si tienes algo que pinte bastante bien, la poquita gente que pueda aportar algo lo va a aportar.

-Para que lo entendemos todos, es un sistema en el que se presenta un proyecto y la gente de convierte en productor aportando cada uno el dinero que tenga.
-En el crowdfunding puede apostar cualquiera por ti, ya sea una serie, un disco o cualquier cosa. La gente puede dar desde un euro hasta 500 euros pero el que presenta el proyecto tiene que ofrecer algo. Los que colaboran se llaman mecenas y se les ofrece algo, una camiseta si aportan 20 euros… Pero tienen que recibir un beneficio. La gente que está intentando hacer algo ahora está tirando mucho de eso, del crowdfunding.

-De gente sin dinero. ¡Cómo han cambiado los tiempos cuando los mecenas lo ponían todo! Pero ya hay ofrecimientos de publicidad por parte de algunas casas.
-Para la web serie nos han ofrecido una ayudita, un growshop de Villamartín y le hemos dicho que sí.

-Y ya desde aquí podéis decir que estáis abiertos a negociar.
-Claro, totalmente.

-Con la cantidad de publicidad subliminal que aparece en las series… Cabe de todo.
-De todo, pero hay que tener un control, pero estamos dispuestos. No hay problema porque ayuden. Al revés.

-¿Cuánto se tarda en grabar un capítulo?
-Yo creo que se tardan dos semanitas para grabarlo tranquilo pero nosotros los grabamos en unos cuatro días porque Álvaro Pérez que es uno de los actores principales se tenía que ir y no volvía en dos meses. Así que en cuatro días nos hemos despachado el capítulo tres.

-O sea, que aquí también es verdad lo que dicen los directores de teatro, que el problema es reunirlos a todos.
-Sí.

-Luego viene el montaje, pero eso es más pausado.
-Se hace más tranquilo, sin ninguna presión ni bulla porque se vaya la luz… Eso en una semana o semana y media está todo terminado si no hay que meter algún efecto de tapar algo, alguna persona que haya por la calle mirando, que lo suelo hacer yo digitalmente. Y en eso se tarda un poquito más.

-¿Se forma bulla en los rodajes?
-Cada vez más. Muchas veces estamos grabando y va uno con la bicicleta y dice “ole, 300 pavos…” y hay que cortar.

-Con to sus mulas…
-Ya nos ha pasado varias veces, pero es una alegría tener que parar por eso, porque la gente te conoce y te grita ole.

-¿Te imaginas haciendo una serie diaria? Tiene que ser agobiante.
-Espérate. Vamos a seguir con 300 pavos que es cada tres meses un capítulo y ya veremos. Pero vamos, lo que venga vino y bueno será.

 

Capítulo 1

Capítulo 2

Capítulo 3

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