Horas tardó el alcalde de Jaén y presidente del PP provincial, José Enrique Fernández de Moya, en hacer suya aquella proclama popular sucesoria de “El rey ha muerto, ¡viva el rey!”, cuando trascendió que el dedo de Rajoy había señalado al secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Juan Manuel Moreno Bonilla, en lugar de confirmar a José Luis Sanz, actual secretario general del PP andaluz. La noticia lo cogió en Córdoba y en un primer momento sólo alcanzó a decir que todos eran muy buenos amigos, los populares. Después, tras su viaje en AVE al Senado completó sus declaraciones. Primero alabó el trabajo de Sanz y después, con los deberes hechos, habló de las “extraordinarias cualidades” de Moreno Bonilla y de su visita al Ayuntamiento de Jaén, a la vez que le pedía “un equipo plural”, a modo de recordatorio de que Fernández de Moya sigue ahí.
“La Junta Directiva Provincial del PP de Jaén avala la candidatura de Moreno Bonilla”, rezaba la nota de prensa que el PP de Jaén enviaba ayer a los medios, mientras aparecía en las primeras imágenes, sonriente, junto al que será el nuevo líder de los populares andaluces. “Reúne el consenso del PP de Andalucía para liderar un proyecto ganador”, decía Fernández de Moya en el comunicado. Se refería a Moreno Bonilla, porque se envió ayer, pero bien hubiera servido esa frase para José Luis Sanz una semana antes.
García Anguita
La cuestión es que el alcalde de Jaén, disciplinado como siempre con los designios de su partido sigue mostrándose dispuesto a lo que su partido quiera para él. El rey ha muerto, ¡viva el rey! Hasta su secretario general en el PP de Jaén, Miguel Ángel García Anguita, cuyas relaciones no atraviesan su mejor momento según proclaman los mentideros populares, dijo ayer que si había alguien para representar a Jaén en la nueva regional del PP, ese era José Enrique Fernández de Moya. Aún no está muerto García Anguita (a quien cortaron su carrera como alcaldable allá por 2005) aunque muchos quieran matarlo políticamente. De hecho, el llamamiento de Fernández de Moya para su sucesión en la Alcaldía al concejal de Urbanismo, Javier Márquez, tendría que pasar primero por la renuncia de García Anguita, número dos en el Ayuntamiento. Y detrás de él está Gabino Puche, que le aconseja y dice, según afirman fuentes populares, que si deja pasar la Alcaldía, en el caso de que Fernández de Moya se vaya, tardaría poco en salir de la secretaría general. Sólo como concejal difícil tendría un puesto como senador o diputado para terminar sus días políticos. Ahora sólo queda esperar qué cargo le dan al alcalde en la Ejecutiva (o en otro lugar), si lo hacen, y si entre todos son capaces de revestirlo de la suficiente importancia como para dejar la Alcaldía que consiguió con más apoyo popular de la historia de Jaén.
