Campo de Gibraltar

Ríos Guijón presenta en San Roque su poemario “Papeles para nadie”

Se trataba de una actividad cultural paralela al 34 Curso de Verano de la UCA y estaba organizada por la Delegación Municipal de Cultura.

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  • Actividad cultural -

El sanroqueño Francisco José Ríos Guijón presentó ayer lunes en el Palacio de los Gobernadores su poemario “Papeles para nadie”. Se trataba de una actividad cultural paralela al 34 Curso de Verano de la UCA y estaba organizada por la Delegación Municipal de Cultura, que dirige la teniente de alcalde Dolores Marchena.

Ríos Guijón nació en San Roque en 1960. Desde muy niño se sintió fascinado por el mundo de los libros y la Literatura. De esa época datan sus primeros bocetos poéticos. Esta vocación continuó en él alternando períodos fructíferos con otros de sequedad creativa. Realizó estudios de Magisterio y ejerce su profesión como docente en Jerez de la Frontera, donde reside con su mujer y sus dos hijas.

Su espíritu inquieto y curioso le ha llevado a realizar muchos cursos y estudios de las más dispares disciplinas, si bien, de todos ellos, se podrían destacar los relacionados con la Psicología Humanista, por haberle aportado un más amplio conocimiento del ser humano, que también queda reflejado en sus poemas.
Su afición a escribir ha quedado hasta ahora relegada al ámbito de lo privado, y es con “Papeles para nadie”, su primer libro, con el que ha decidido traspasar ese perímetro. Se trata de los versos de un hombre que se enfrenta a las principales cuestiones de la vida. En ellos se dan cita la muerte, la soledad, la amistad, la paternidad, el amor, la felicidad y el miedo, entre otros.
Descarnada y sencilla a la vez, la poesía de Francisco José Ríos Guijón deja entrever el alma que la sostiene. Así, con una gran sensibilidad para lo sutil y un gran esmero en elegir la palabra adecuada, su poesía nos enfrenta cara a cara con las grandes preguntas del ser humano, a la vez que nos toca la emoción.
La sinceridad, el desgarro y el valor de sus palabras no pueden dejarnos indiferentes, sino que nos conmueven hasta lo más hondo.

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