El Gallinero

Encanto de otra noche de cuchillos largos

El cierre de semifinal colocó toda la carne en el asador con grupos que desplegaron sus mejores letras

Publicidad Ai Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai
  • La cazuela -

La noche de los cuchillos largos respondió y puso el colofón merecido a unas semifinales que han brillado con luz propia, no podía ser de otra forma. El Concurso entra en su recta final, más apasionante y más impredecible que nunca.

Todo está por decidir y todo por escribirse. Ayer tuvo un nuevo capítulo que certificó una noche redonda. Nuevamente el ambiente dibujó una sesión que aguardaba horas triunfales. No hay dos sin tres y la decisiva no guardó ni se reservó nada. Se puso toda la carne en el asador, la ocasión lo merecía.

Los nervios jugaron a porfía con la ilusión de los que lucharon por colarse en la gran final y los que, aun sabiendo las dificultades que entraña, no dejaron nada al azar. La fiesta del desparpajo y la gracia, al menos en el Falla, no entiende de casualidades.

Desde el tango clásico y gaditano de Paco Martínez Mora al más innovador de Luis Rivero y su colorida musicalidad; desde los pasodobles acaramelados de Tino Tovar, los profundos de Juan Carlos Aragón o la dulzura de Jesús Bienvenido, pasando por el 3x4 más familiar del Love o los más auténticos y viñeros de Manolín Gálvez.

Todo eso sin olvidar el cierre ante de la deliberación con una pasional comparsa de Ángel Subiela con ‘Los doce’.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN