Huelva

Comas intensifica sus trabas

El mandatario recreativista no deja de poner condiciones a los interesados onubenses que quieren hacerse con el club

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
  • En una reunión de accionistas -

Se paralizan las negociaciones de compra-venta del 75% de acciones del Recreativo de Huelva. Todo se debe a las altas pretensiones de Pablo Comas, accionista mayoritario del club onubense. La operación se ha estancado, según aseguraron a Viva Huelva fuentes cercanas a la misma,  tras la última negativa del empresario onubense a la oferta de 6,5 millones de euros que presentó la pasada semana el grupo de empresarios onubenses, que empiezan a impacientarse por la lentitud para cerrar una operación que estuvo a punto de firmarse ante notario hace varias semanas.
Sin embargo, los requerimientos de Pablo Comas no cesan, ya que exige el pago inmediato de una cantidad que ronda los 500.000 euros para seguir negociando, según fuentes cercanas a la operación, y unos porcentajes importantes en caso de ascensos a Primera y Segunda división, algo que también condiciona la negociación por otro pago previsto de Comas a Víctor Hugo Mesa, empresario uruguayo que se marchó del club el pasado verano.
La postura de Gildoy España, empresa propietaria del 75% del club onubense, es clara y no está dispuesto a vender a cualquier precio. Tienen la llave para liquidar al Decano y acabar con 126 años de historia si el grupo empresarial onubense no llega a las pretensiones que ellos piden.
La Federación de Peñas, a través de las gestiones de su presidente José Antonio Cabrera, consiguió hace varios meses aunar fuerzas entre distintas empresas de la provincia onubense para hacerse con la mayoría de acciones del Recreativo. Ante la renuncia de Comas de poner un euro más en el club, las negociaciones para la compra se agilizaron y hace un par de semanas estaba prevista la cita con la notaría para certificar el acuerdo. Sin embargo, el empresario madrileño ahora no para de poner condiciones para que lleve a cabo la operación y los interesados onubenses empiezan a desesperarse porque no ven hasta dónde hay que llegar con Comas para que libere al Recreativo, un club que atraviesa por los peores momentos de su longeva existencia.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN