San Fernando

Colón se paseó por las cortes con una Tierra más pequeña bajo el brazo

La conferencia 'Astronomía y el descubrimiento de América' fue impartida por Antonio Carmona Balboa antes de la observación de Marte y la Luna en la calle Real.

Publicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Cargando el reproductor....

Antonio Carmona Balboa fue el encargado de pronunciar la segunda de las conferencias organizadas por la Agrupación Astronómica de San Fernando, que está celebrando este año los primeros veinte años desde su creación.

La disertación llevaba por título 'Astronomía y el descubrimiento de América' y entre los detalles curiosos que mencionó estuvo la astucia de Cristóbal Colón para convencer finalmente a los Reyes Católicos de que su empresa era posible.

Ya entonces existía una teoría de un astrónomo iraní que mantenía que la tierra tiene 40.000 kilómetros de circunferencia, cantidad tan exacta que sigue en uso. No obstante los romanos mantenían que no eran 40.000 sino un poco más de 30.000 kilómetros, por lo que Colón se agarró a la teoría que más le convenía para pasear por todas las cortes europeas que la distancia a las Indias era de sólo 750 leguas.

El ardid de Colón -y esto no es parte de la conferencia- es una tónica generalizada entre los visionarios y personas que quieren financiar un proyecto o universalizar el uso de alguna norma. Es el caso de Antonio de Nebrija, quien ante la pregunta de la reina Isabel de Castilla de que para qué querían una gramática y que todo el mundo hablara igual cuando ya se entendían a las perfección, le respondió donde más le dolía.

La cantidad de dialectos y hablas comarcales impedían que los ciudadanos entendieran el habla de la corte y por ende que no se enteraran de que tenían que pagar los impuestos. Imponiendo una forma de hablar única todos entenderían sus obligaciones con el fisco. Argumento que obviamente convenció a la reina.

Tras la conferencia tuvo lugar una observación frente al Centro de Congresos centrada en Marte y La Luna, que se vio dificultada en algunos momentos por las nubes.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN