Agentes de la Policía Local de Sevilla han identificado y puesto a disposición judicial a un hombre de unos 50 años de edad, que perdió el control cuando conducía y volcó su vehículo causando daños a otros dos turismos que permanecían estacionados cuando circulaba sin seguro. Además, cuando fue sometido a las pertinentes pruebas de alcoholemia, este conductor triplicó la tasa máxima de alcohol permitida en sangre.
Los hechos se produjeron a última hora de la pasada noche, cuando desde el Centro de Control se envió una patrulla a la Calle Pruna, donde se había producido un accidente. Al llegar la Policía Local, los agentes comprobaron que había un vehículo volcado que previamente había impactado con otros dos que permanecían estacionados, y habría causado daños a un tercero. Los propietarios se personaron en el lugar de los hechos para hacerse cargo de estos coches.
Según las primeras pesquisas que corroboran la versión del conductor, el accidente se produjo cuando el denunciado circulaba por esta vía y, posiblemente, "pudo dar una cabezada", momento en el que colisionó con el primer vehículo, tras lo que se produjo el vuelco y la colisión con el segundo que estaba estacionado en el lado contrario, donde finalmente quedó detenido.
Dado que el conductor presentaba síntomas de encontrarse bajo los efectos del alcohol, se le realizó la prueba de detección alcohólica, arrojando un resultado positivo que triplicaba el máximo permitido. Además, en la comprobación de la documentación, resultó que el vehículo carecía de seguro obligatorio, por lo que los agentes de la Policía Local lo incautaron y depositaron en los almacenes municipales, informando al conductor de que todo lo sucedido sería puesto en conocimiento de la autoridad judicial. Este varón rehusó ser asistido de las heridas leves que presentaba por lo que acudió al médico por sus propios medios.
