Pablo Casado, presidente del PP nacional, estuvo en Huelva este jueves para visitar las hermandades rocieras de Huelva y Emigrantes y darse un baño de masas en el Paseo de la Ría. El líder de los populares estuvo acompañado por cabezas visibles del partido en España como Fátima Báñez; en Andalucía, el candidato Juanma Moreno; y en Huelva, Manuel Andrés González, Loles López y Pilar Marín.
Lo que iba a ser una rueda de prensa acabó siendo un acto del partido en vía pública. Casado vio en Huelva un lugar ideal para que se hiciera fuerte el Partido Popular en Andalucía de cara a las elecciones del 2 de diciembre y aseguró que el objetivo es poner fin a la “inercia que arruina Andalucía”.
Por ello, Casado destacó la calidad de la lista por Huelva al Parlamento y el programa con el que su partido se presenta a las andaluzas, en las que salen “a ganar y a cambiar” la realidad de la comunidad autónoma. “El PP es la única garantía de cambio”, confesó. Además, propuso “bajar los impuestos, eliminar la burocracia y mejorar la sanidad y la educación” en Andalucía en una precampaña que se presenta “intensa pero tremendamente ilusionante”.
El líder de los populares tuvo dos guiños especiales. Uno de ellos fue a Guillermo García de Longoria, una de las voces que más apoyó al ‘casadismo’ y que se ha quedado fuera de la lista al Parlamento. “Irá en otras listas”, dijo el presidente del PP sobre el ya exparlamentario andaluz.
También, Casado tuvo otro gesto con Juan José Cortés, el padre de Mari Luz, que fue asesinada en 2008, después de que haya decidido afiliarse al PP. “Hace un rato puso dos flores en la tumba de su hija y ahora está aquí con nosotros. Es el mejor reflejo de la sociedad civil”, dijo Casado sobre Cortés.
De otro lado, también tomó la palabra Juanma Moreno, el candidato por el PP a la presidencia de la Junta. Él fue muy claro y contundente y resumió las próximas andaluzas con la pregunta: “¿quiere más de 40 años de socialismo en Andalucía o no?”.
Así pues, la única vía para ello, según él, es votar al PP porque hacerlo por Ciudadanos sería “increíble por haber firmado un acuerdo de investidura con Susana Díaz Pacheco y ahora decir que el PSOE ha robado” y hacerlo por Podemos sería anómalo porque “ha pasado de estar a muerte contra Susana a estar a muerte con Susana”.
