La iglesia de Santa Catalina de Sevilla, tras 14 años de cierre al público, se ha reinaugurado en la mañana de este domingo con la consagración del altar mayor mediante una eucaristía presidida por el arzobispo de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo, y que ha contado con una nutrida representación del clero, autoridades civiles y militares, hermandades y fieles.
El arzobispo ha destacado en su homilía la alegría de todos los presentes por la consecución de "una meta largamente soñada, que ha encontrado innumerables imponderables y dificultades, felizmente vencidas con la ayuda de Dios". "El resultado está a la vista, hemos recuperado un templo emblemático, de porte casi catedralicio, verdadero compendio de la historia del arte cristiano a partir del siglo quinto, orgullo de Sevilla y de la Archidiócesis", ha añadido durante su intervención, según ha reseñado el Arzobispado en un comunicado.
Así pues, Asenjo ha dado gracias a Dios por "este final feliz", así como a "todos los que han hecho posible este milagro", entre miembros de la Curia Diocesana y el arquitecto Francisco Jurado, los arqueólogos, "que han desarrollado una tarea admirable", los restauradores de bienes muebles y las empresas constructoras, "cuyos profesionales y oficios han dejado en esta obra lo mejor de sí mismos".
También ha agradecido a las instituciones que han contribuido económicamente en esta restauración, tasada en casi cuatro millones de euros. Según ha enumerado, se trata de la propia Archidiócesis, que ha aportado algo más de dos millones; el Ayuntamiento de Sevilla, un millón; la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, 400.000 euros; el Ministerio de Cultura, 200.000 para los trabajos previos hace catorce años; y la Fundación La Caixa, con 150.000.
Seguidamente, ha recordado que la reapertura al culto de esta iglesia coincide con la solemnidad de Jesucristo Rey del Universo y la festividad de la santa que da nombre al templo. También ha explicado la importancia de la consagración del altar, al definirla como "una de las ceremonias más solemnes y ricas en simbolismo de toda la liturgia católica.
En la parte final de su homilía, Asenjo ha pedido a Dios por la feligresía y, particularmente, por el párroco, Francisco José Blanc, a quien posteriormente ha dado el decreto de entrega del templo. Tras la misma, se procedió a comenzar rito de la consagración del altar, cuya liturgia se divide en la dedicación del altar, el rezo de letanías, crisma, la incensación y revestimiento del mismo, para posteriormente finalizar la misa.
ESPADAS: "HAN SIDO 14 AÑOS CON MUCHAS DIFICULTADES"
Entre las autoridades civiles en la eucaristía han estado el delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis; el alcalde de la ciudad, Juan Espadas; el delegado territorial de Cultura de Sevilla, José Girela, y el exalcalde y cabeza de lista del PP por Sevilla al Parlamento de Andalucía, Juan Ignacio Zoido.
Espadas ha calificado la misa como "una ceremonia muy especial" porque "todos los fieles han visto cumplido un deseo". Así, ha valorizado la recuperación del edificio para la ciudad y para el barrio al ser un Bien de Interés Cultural (BIC) y de las iglesias más queridas de la ciudad.
"Han sido 14 años desde que se clausuró con muchas dificultades a la hora de financiar esta inversión, y creo que el tesón del Arzobispado ha sido decisivo a la hora de conciliar administraciones y empresas que han colaborado en una gran obra de restauración", ha manifestado.
Por su parte, su antecesor en el cargo se ha mostrado crítico con la aportación que la Junta de Andalucía ha hecho en la rehabilitación de la iglesia al afirmar que "no ha contribuido con ninguna aportación".
Zoido ha criticado al PSOE y ha expuesto que "el PP está comprometido" a invertir en la rehabilitación del patrimonio artístico-histórico de toda la provincia porque su partido quiere potenciarlo y "ponerlo al servicio de todos los sevillanos para que sea una fuente de riqueza".
