Concha Buika llega a Sevilla para actuar hoy, martes 22 de octubre, en el imponente escenario del Teatro de la Maestranza, todo un acontecimiento musical, dado el tremendo calado de la artista, con orígenes en Guinea Ecuatorial, nacida en la isla española de Palma de Mallorca y residente en la actualidad en Miami, Estados Unidos.
Su música es una fusión de estilos, que incluye flamenco, jazz, reggae, soul, funk y blues, entre otros géneros. El álbum “Niña de fuego” logró dos nominaciones al Grammy latino (2008), que sí acabó obteniendo con “El último trago” (2010), al mejor disco tradicional tropical.
Buika atendió a Viva Sevilla en las instalaciones del Iberostar Hotel en la Torre Sevilla.
Inminente concierto en Sevilla, ¿qué le va a ofrecer al público sureño?
–Pues, la verdad, no lo sé. No suelo preparar los repertorios con antelación. Hay que subirse al escenario como cuando se encuentra el amor, sin pretensiones, sin planificaciones, sin nada. Depende como me encuentre ese día y la atmósfera que vea en el teatro. Solemos decidir el repertorio sobre la marcha, una vez estemos frente al público. Vengo rodeada de una maravillosa banda, compuesta por mujeres.
Está acostumbrada a pisar los escenarios más importantes del mundo. En Sevilla la acoge el más emblemático de la ciudad, el Teatro Maestranza.
–Sevilla es capital mundial de la música, al igual que cuando te presentas en New York, Sidney y otras ciudades, la sensación es un poco de tembleque, por la responsabilidad que se tiene al actuar en puntos tan importantes. Esta tierra le ha dado al mundo una cantidad de artistas impresionante. Aquí vive gente a la que yo admiro mucho, como Joaquín Porrina. De su padre, Ramón el Portugués, yo he aprendido mucho. Aquí viven cantaores, percusionistas, bailaores, de primer nivel internacional. Sientes ese pequeño resquemor por dentro, pero a la vez un gran orgullo de poder presentarme en una ciudad tan entendida.
Se le compara con voces de la talla de Nina Simone, de Tina Turner o de Aretha Franklin. ¿Cómo reacciona ante estos halagos?
–Me sorprende y me halaga, a la vez que me da miedo. Pero me gustaría decir que todos tenemos en nuestro imaginario ser seres únicos y especiales, y a mí me gustaría vivir con esa idea. A nadie le gusta ser comparado con nadie, el querer ser únicos en nuestra identidad nos hace grandes. No hay que tenerle miedo a los muertos, nuestro momento es ahora y que nuestros nombres estén por encima de los nombres del pasado. Estamos hablando del presente, pero sin dejar de reconocer y recordar constantemente a esos grandes artistas. Y no dejar de aprender nunca. Te diré que yo he escuchado hablar en Miami de Camarón, en New York de Marchena o Paco de Lucía, y no puedes obviar algo así. Yo lucho por un premio que es mayor que todos los que te puedan dar aquí, que es la eternidad.
Hace poco que ha colaborado con un artista realmente excepcional como Carlos Santana...
–Es maravilloso, su persona es aun más grande que sus discos, aunque estos son inconmensurables. Parece que viene de otro planeta, tiene una juventud inacabable, un poder en la mirada y en el habla fuera de lo normal, solamente tenerlo enfrente te impresiona, pero a la vez es un niño. Es ese espíritu joven que tienen los genios y que le acompaña toda la vida.
¿Cuáles son los planes de Concha Buika después de su presencia en Sevilla?
–Seguimos de gira, ahora vamos a hacer unos conciertos en México y luego seguir con la grabación del disco y preparar la gira del año que viene.
