Un anciano argentino de 84 años simuló estar enfermo el día de su cumpleaños para no pasar el día solo. La historia la hemos conocido gracias a una de las enfermeras que lo atendió. Ella se llama Gisel Rach, y compartió en Facebook una fotografía del abuelete e hizo pública la triste historia.
«Anoche este hombre fue a la guardia por una «cefalea» y lo pongo entre comillas porque ¿saben cuál era su verdadera dolencia? Hoy cumple 84 años y no quería estar solo. Sí, así como lo leen. Seguro se te cerró el pecho igual que a mi y a mis compañeros».
Según explica la enfermera, el anciano nunca tuvo hijos «y su compañera de vida se fue hace 4 años. Sus hermanos fallecieron todos», así que hicieron algo maravilloso por él.
«Decidimos comprarle una mini tortita, una vela para que pida lo 3 deseos y como verán improvisamos unos globos con guantes. La cara de este hombre y sus ojos llenos de lágrimas de tanta emoción por algo tan simple como esto no me lo olvido NUNCA más. Uno de sus deseos fue que el próximo año le pase lo mismo».
