La Sierra de San Cristóbal estrena nueva junta directiva

La asociación de vecinos Azada, que corresponde a la Sierra de San Cristóbal, cuenta ya con una nueva junta directiva al frente de los asuntos del barrio, dando por tanto paso el ex presidente, Juan Jiménez, a un grupo bastante joven que tiene, según sus propias palabras, “mucha ilusión y ganas de trabajar”.

La media de edad de esta nueva junta directiva está señalada en unos 28 años, explica el presidente saliente, teniendo a su frente a una mujer, Ana María Toro García. “Lo bueno que tiene esta nueva junta directiva, creo yo, es que tiene juventud”, una tarea que todas las entidades vecinales tienen entre sus asignaturas pendientes, atraer a los jóvenes a implicarse en el proyecto del barrio, algo que por el momento sólo ha conseguido la Sierra de San Cristóbal.

Así, el resto de cargos son: el vicepresidente es Antonio Ruiz; la secretaria, Elena Sánchez; la tesorera, Patricia Obregón, y los vocales, Daniel Gago, Juan Manuel Griló. María del Carmen Fernández y Antonio Fernández.

La primera de los compromisos a los que tendrá que hacer frente esta asociación de vecinos será a reunirse hoy a las 13.30 horas con el alcalde, Enrique Moresco, para su presentación oficial, pues las elecciones tuvieron lugar el pasado domingo a las 19.30 horas más o menos, momento en que se celebró la asamblea general.

Entre los temas que pretende abordar esta nueva junta directiva con el alcalde están el caso del chabolismo, la prometida mesa de trabajo con la Sierra, la marquesina, o la situación del barrio en el Plan General así como las alegaciones, que aún no han sido contestadas.

La nueva junta directiva ha solicitado a Juan Jiménez que acepte un cargo de vocal sin ningún tipo de responsabilidad, y teniendo en cuenta el esfuerzo que están realizando por el barrio en el que viven y sobre todo porque han puesto mucho interés en conformar la junta directiva, el ex presidente del barrio ha accedido a asesorarlos mientras toman su periodo de rodaje, y como bien indica, “hasta que ellos quieran seguiré por aquí, porque sigo viviendo en la Sierra y puedo estar involucrado en cualquier asunto que así lo requiera”, pero deja claro que de ahora en adelante la asociación de vecinos tiene que funcionar gracias a la nueva junta directiva elegida por unanimidad por más de 60 socios.