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Andalucía

Tras el alga invasora y las medusas llegan las salpas, las nuevas visitantes de Málaga

Son unos invertebrados marinos de cuerpo gelatinoso y transparente que han sorprendido a vecinos y turistas por su abundancia y su aspecto

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Salpas.

Salpas.

Salpas.

  • Se extienden en los últimos días en muchas zonas de la costa, desde Almería hasta el Campo de Gibraltar
  • Son inofensivas para el ser humano, ya que no tienen ningún efecto urticante ni tóxico
  • Contribuyen a la eliminación del exceso de fitoplancton y al secuestro de carbono, lo que ayuda a mitigar el cambio climático

Tras años de sufrir la presencia de medusas y algas invasoras, las playas de la Costa del Sol han recibido este año a unas inesperadas huéspedes: las salpas, unos invertebrados marinos de cuerpo gelatinoso y transparente que han sorprendido a vecinos y turistas por su abundancia y su aspecto.

Lo cierto es que no sólo han aparecido en playas de la provincia de Málaga, sino que se extienden en los últimos días en muchas zonas de la costa, desde Almería hasta el Campo de Gibraltar.

Aunque son habituales del mar de Alborán, no suelen acercarse tanto a la costa, salvo cuando hay una explosión de fitoplancton que les sirve de alimento.

Las salpas son animales filtradores que se alimentan de fitoplancton, es decir, de microalgas que flotan en el agua. Se desplazan mediante contracciones musculares y pueden formar colonias de varios individuos unidos entre sí

INOFENSIVAS PERO MOLESTAS

Según los expertos, las salpas son inofensivas para el ser humano, ya que no tienen ningún efecto urticante ni tóxico. De hecho, se consideran beneficiosas para el ecosistema marino, ya que contribuyen a la eliminación del exceso de fitoplancton y al secuestro de carbono, lo que ayuda a mitigar el cambio climático.

Sin embargo, su presencia masiva puede causar molestias a los bañistas, que se encuentran con una masa viscosa y pegajosa al entrar al agua. Además, al morir y quedar varadas en la arena, las salpas pueden generar malos olores y atraer insectos.

Y ante esas molestias, gastos para los ayuntamientos, que intentan cada año en temporada alta mantener sus playas libres de algas y medusas, con dispositivos extras de limpieza y sofisticados vehículos. Este año todo pinta que, además de retirar medusas y algas, tocará limpiar de salpas las orillas.

 

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