Arcos

Tres nuevos puntos en un partido estratosférico de los blancos

El Arcos continúa encandilando a sus seguidores en el Barbadillo. Completó un soberbio encuentro ante el gallito Gerena

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  • El Arcos logró los tres puntos. -

ARCOS C.F.          3
C.D. GERENA       1

Arcos: Fran, Nano, Oca, Adri, Chato, Dani Zúñiga, Melo (Juanjo, 88'), Jacobo (Zafra, 67'), Juan Gómez, Juanca y Maqui (Santi, 83’).

Gerena: Luisma, Andrada, Guti, Cabana, Tomás (David Toro, 61'), Tore, Cannataro (Álvaro, 73'), Iván Navarro, Rafa (Gabi, 87'), Chuli y Giráldez.

Goles: 1-0 (30') Nano. 2-0(42') Dani Zúñiga. 2-1 (55') Iván Navarro. 3-1(79') Juanca.

Árbitro: Santiago Blanco (onubense). Amonestó con cartulina amarilla a los locales Maqui, Adri, Chato y Melo, así como a los visitantes Andrada, Tore y Rafa y expulsó al entrenador visitante Diego Román en el minuto 44 por protestar.

Incidencias: Partido correspondiente a la 14ª jornada en el Grupo X de Tercera División, disputado en el Antonio Barbadillo de Arcos ante unos 600 espectadores.

 

El Arcos conquistó tres nuevos puntos tras superar a un muy buen oponente, el Gerena de Diego Román, que se vio superado en todas las zonas del campo por un Arcos que se puso el mono de trabajo para maniatar y cortocircuitar los intentos de los mineros por jugar con la suficiente comodidad como para poder dar fluidez a su estilo de toque y combinación, que el Arcos destruyó de raíz a base de presión colectiva y sincronizada, anulando en origen el fútbol preciosista y mecanizado de los rojinegros, que tenían enormes complicaciones para obtener superioridad en la parcela ancha donde casi todos los duelos se resolvían a favor de los blancos. Los de Jose Herrera se empleaban con una intensidad inusitada, como si estuviesen jugándose la vida en un choque decisivo. El planteamiento de Herrera presentaba una novedad muy interesante: el debut de Chato en el lateral zurdo tras seis meses y 12 días sin aparecer en las alineaciones por lesión.Era una carta desconocida que el jerezano se sacaba de la manga en el último instante para dar más fortaleza y seguridad a la línea zaguera de los del Barbadillo, cerrando el debate de la capacidad o no de Juan Gómez para ejercer dicha función. El equipo apuntalaba la defensa por el costado izquierdo permitiendo libertad de movimientos en la media punta a un Juan Gómez al que el campo se le quedaba pequeño. La movilidad e intensidad del de Aznalcázar revolucionaron a un Arcos infatigable en el trabajo sin balón y en la recuperación tras pérdida. Por su parte, Zúñiga marcaba la pauta tanto en el esfuerzo para robar balones como a la hora de buscar al compañero mejor situado y habilitarlo cara al portal contrario. Sus prestaciones siguen sorprendiendo a todo el mundo y con el supergolazo que marcó se sacude todos los fantasmas que le estaban molestando en los últimos partidos, sobre todo fuera de casa, como en Castilleja o Sevilla C, donde erró en varias ocasiones la dirección de sus disparos como si le movieran la portería de sitio en el momento de conectar sus tiros. Ayer se marcó un partido soberbio, de esos que te consagran de por vida como futbolista preferido por la afición: peleón, luchador, trabajador infatigable, clarividente en sus decisiones, solidario con los compañeros y como puntal indispensable para sostener y aguantar el entramado arcense en la medular. La igualdad de la primera media hora, típica del periodo de desgaste mutuo, era el preludio al primer gol local, que llegaba en una internada de Juanca a pase de Juan Gómez y centro atrás del jerezano con aclarado de Jacobo a la llegada de cara de Nano, que machacó desde cerca su primer tanto de la temporada en el minuto 30. Una vez despejados los temores y abierta la lata solo quedaba aumentar el marcador todo lo posible por lo que pudiera venir después en una más que previsible reacción de los rojinegros, pero nadie esperaba el latigazo de Zúñiga desde fuera del área y la parábola que hizo el balón para superar a Luisma en el minuto 42 para poner el 2-0 en la recta final de la primera parte, un gol precedido de una inexistente falta de Melo a Tore que el árbitro no cobró y que sacó de quicio al míster visitante Diego Román, al que el colegiado onubense Santiago Blanco mandó al vestuario antes de tiempo por protestar.

A los siete minutos de iniciada la segunda parte, Zúñiga volvió a agitar la varita y le puso un balón perfecto a Maqui, que tardó un poco en encarar a Luisma permitiendo que el guardameta le cerrara ángulo y le ganara el mano a mano. Un minuto después, una volea de Nano a punto estuvo de lograr su objetivo, pero la pelota salió fuera. Dos minutos más tarde, Tore dejó su sello de calidad poniéndole un balón de gol a Iván Navarro, máximo goleador del Gerena, que no desaprovechó para batir a Fran de fuerte volea y apretar un marcador claro a favor del Arcos hasta ese momento. El gol abrió la caja de los truenos y dio paso a unos minutos de inquietud en las filas locales que Jose Herrera interpretó como la señal para dar entrada a Zafra en el campo. Con él en la banda por un cansado Jacobo, el Arcos volvió a estirarse en velocidad con la ayuda de Zúñiga y Juan Gómez más la brega incansable de Juanca y Maqui, que no paraban de buscar espacios. Antes de que llegara el tercero de los blancos, Maqui la tuvo a pase de Juan Gómez, pero se le fue arriba con todo a favor. Faltaba la rúbrica al partidazo arcense y para eso estaba Zafra en el campo, inventándose un pase imposible a Juanca que el jerezano convirtió en un gol de verdadero ‘killer’ del área, haciéndose sitio para golpear el balón con decisión y alojarlo en la portería del Gerena. De ahí al final, poco o nada que destacar, excepto la entrada de Canty por Maqui y del juvenil Juanjo por Melo, lo mismo que una semana antes en Sevilla y una recta final en la que los de Jose Herrera apenas si sufrieron sobresaltos para aguantar el marcador y volver a sumar los tres puntos en litigio. Misión cumplida con nota.

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