Un estudio encargado por la AMPA recientemente para conocer las necesidades y carencias del centro demostró que de los 46 niños con necesidades educativas especiales, 32 reciben algún tipo de atención, aunque ésta suele ser deficitaria. Los 14 restantes, pese a ser diagnosticados como niños con necesidades educativas especiales, no reciben la atención educativa pertinente a sus necesidades.
El mismo estudio indica, además, que se necesita incrementar la plantilla de personal especializado que pueda acometer estas atenciones: concretamente, incorporar un especialista en Pedagogía Terapéutica (PT) más, otro en Audición y Lenguaje (AL) y un monitor.