La sesión plenaria del mes de septiembre sirvió para apoyar la propuesta de Andalucía por Sí (AxSí) de instar a la Consejería de Educación de la Junta a que “reconsidere el decálogo publicado en materia educativa y se reúna de forma inmediata con los alcaldes con el objeto de buscar consensuar las mejores garantías para la educación pública”
La delegada municipal de Educación, Raquel Moral expuso el motivo del rechazo de las instrucciones publicadas el pasado 6 de julio por parte de la Viceconsejería de Educación, relativas a la organización de los centros docentes, prevención, protección, vigilancia y promoción de salud, en referencia al COVID19, así como el decálogo de la vuelta al colegio emitido el 5 de agosto. Entre estos motivos, Moral señaló que “nuestro municipio tiene 8 Centros de Educación Infantil y Primaria, seis en Barbate, uno en la ELA de Zahara de los Atunes y el Colegio Rural Almenara con tres sedes San Ambrosio, Zahora y el Soto por lo que son 10 infraestructuras diferente, a los que hay que sumar el Centro de Adultos y los 3 de secundarias, lo que supone un esfuerzo extra en las competencias de vigilancia, limpieza y desinfección que correspondería al municipio, sin partida presupuestaria para estos gastos y sin ningún tipo de ayuda al respecto por parte de otras entidades”. La edil señala que es una carga económica “excesiva para un Ayuntamiento como el de Barbate”
Para paliar este sobre esfuerzo económico, afirman los andalucistas, “se ha solicitado ayuda o subvenciones para poder abordarlos, obteniendo sólo la negativa como respuesta”. No obstante, la delegada municipal afirma que “somos conscientes de que es necesario que se refuercen estos servicios y para ello se está barajando soluciones para poder ampliar la plantilla con personal que preste estos servicios”.
Moral anunció que, para ofrecer estos servicios el Ayuntamiento se plantea la “refuerzo en los servicios de limpieza; seguridad y desinfección de los centros de infantil y primaria”. Una sobre carga, que asumirá el Consistorio, pero “que desde la Consejería se debería de replantear el oír a los alcaldes, y dotar de mayor servicios o partidas económicas para poder hacer frente a estos gastos”.
