La Delegación Municipal de Educación continúa desarrollando el proyecto ‘Aprendiendo a convivir’, dentro del programa de Mejora de la Convivencia Educativa ‘Convive’, incluido en el Plan de Local de Acción en Materia Educativa. Esta iniciativa está siendo impartida gracias a las contrataciones de los planes de empleo de la Junta de Andalucía e interviene en medio abierto en las zonas más desfavorecidas del municipio, con actuaciones en centros escolares y en la calle. “El objetivo de este proyecto es el de conocer de primera mano las necesidades que los y las menores detectan sobre sus barrios, para así prevenir futuras conductas de riesgo socioeducativo, con el fin de evitar el absentismo escolar, el fracaso escolar y la delincuencia”, ha destacado el delegado municipal de Educación, Joaquín Páez.
Este proyecto empezó a desarrollarse el pasado mes de octubre y desde entonces se han ido llevando a cabo varias actividades con grupos de jóvenes reducidos para poder así mantener un contacto directo y conocer su realidad. “La educación de calle es una intervención en medio abierto, cuyo objetivo es conectar con la realidad de las personas y acompañarlas en un proceso de mejora educativa y social”, ha explicado el edil.
En este sentido, las funciones del educador de calle son las de conocer el barrio donde se centra la intervención, detectar situaciones de riesgo, facilitar condiciones que favorezcan el desarrollo de los usuarios, prevenir conductas delictivas, potenciar el desarrollo integral de las personas, facilitar la integración y participación y presentar nuevos estilos de vida. Este proyecto se centra en diversas áreas de trabajo como son habilidades sociales y de comunicación, desarrollo y gestión emocional, normas y límites, asunción de responsabilidades, resolución de conflictos, reflexión sobre las consecuencias de los actos propios, expectativas de futuro, salud, género, medio ambiente e interculturalidad.
Cabe destacar que las actividades e intervenciones realizadas en este primer trimestre han sido análisis de la realidad de la zona de intervención, coordinación con los orientadores de centro educativo, coordinación con el Centro de Servicios Sociales Generales y Unidad de Trabajo Social de la zona, así como el día internacional de la violencia de género. Además, hay que sumar otros como día mundial contra el VIH, actividades de habilidades sociales, actividades de peluquería y estética y un taller sobre ocupación vocacional y proyectos futuros profesionales.
Este proyecto, que finalizará el próximo mes de marzo, pretende que los adolescentes que se han acogido en estas intervenciones adquieran herramientas para poder gestionar sus metas y objetivos de vida, teniendo en cuenta los recursos de sus barrios.
Además, Páez ha agradecido la implicación por parte de los centros educativos de Educación Secundaria en los que se está realizando el proyecto y de todos los demás agentes sociales implicados en el mismo, como son el Centro de Servicios Sociales, la Policía Local, la Delegación de Salud y la Delegación de la Mujer.