La Junta de Andalucía, si el Juzgado de Montoro (Córdoba) no se pronuncia al respecto, exhumará "en tres o cuatro meses" los restos que ha localizado este año la Asociación de Memoria Histórica de Aguilar de la Frontera (Aremehisa) en el Cementerio de dicha localidad cordobesa y que pertenecen a cuatro guerrilleros "asesinados" por el régimen franquista durante los años 40 del pasado siglo.
Así lo ha anunciado este martes el director general de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía, Luis Naranjo, quien ha señalado que, tras los sondeos realizados en el camposanto aguilarense por Aremhisa, con el apoyo económico de la Administración autonómica, y que permitieron hallar los citados restos, la Junta interpuso una denuncia ante el mencionado juzgado montoreño.
Naranjo ha recordado que, ante la localización de restos de represaliados por la dictadura franquista, la Junta siempre presenta denuncia en el juzgado correspondiente, "porque, según la jurisprudencia internacional", la "aplicación brutal de la Ley de Fugas, mediante el asesinato sin juicio", que en este caso sufrieron los cuatro antifranquistas, es un ejemplo más de las "violaciones masivas de derechos humanos" que se perpetraron durante el franquismo, siendo "delitos imprescriptibles y no sujetos a ninguna ley de amnistía".
Lo que pretende el Gobierno andaluz en este, como en otros casos, es que el juzgado "investigue y determine las causas históricas de estos asesinatos", que tuvieron lugar "en un contexto de violencia extrema en la postguerra, en los años 40, y en aplicación de la Ley de Fugas y de la Ley de Represión de Bandidaje y el Terrorismo, sin que hubiera ningún tipo de juicio".
Naranjo, que ha estado acompañado por el presidente de Aremehisa, Rafael Espino, y por la arqueóloga Virginia Barea, encargada de los sondeos realizados en el cementerio de Aguilar, ha subrayado que, "con poco dinero y con la ayuda y colaboración del voluntariado de la memoria", representado por asociaciones como Aremehisa, "estamos consiguiendo que, poco a poco, vayan saliendo a la luz las evidencias de los crímenes del franquismo".
Por eso, según ha precisado, "una vez pasado un tiempo (de unos tres o cuatro meses) y si el juzgado no responde, procederemos a la exhumación de los restos que han aparecido" y se llevará a cabo su identificación, mediante "pruebas de ADN y antropométricas", como paso ineludible para que entregarlos a sus familiares, cuyas demandas de apoyo ante Aremehisa en 2012 llevaron a que dicha asociación realizase, ya en 2013, una cata para la localización de los restos en el camposanto aguilarense, que luego halló con los sondeos efectuados este mismo año.
