Los de Aíto García Reneses no fueron un rival nada digno para los San Emeterio y compañía
Ridículo cajista en el Buesa Arena en una oportunidad única para tomar ventaja en la carrera por el playoff. Y eso que vitorianos y sevillanos comenzaron el duelo inmersos en plena igualdad de victorias y por ende no fue menos el primer cuarto. Durante los diez primeros minutos ninguno de los dos conjuntos abrieron brecha y unos, los de casa, con San Emeterio al timón, y los otros, los de San Pablo, con la inspiración desde el perímetro de Bamforth, remaron para igualar a 22 al término del primer cuarto. Dos buenas acciones de Nocioni le daría la ventaja a Baskonia al inicio del segundo periodo (31-24). El Caja se fue estancando en ataque y San Emeterio seguía haciendo de las suyas (14) para llevarse a 12 la ventaja en el tiempo de descanso (44-32).
Se reanudó el duelo con la misma inercia. El Laboral Kutxa continuó anotando y abriendo distancia en los primeros cinco minutos del tercer cuarto (55-34). Los de Aíto estaban K.O. con sólo 11 puntos en su casillero en el tercer episodio y con una problemática fuga en defensa (66-43). El luminoso era tajante en el arranque del último cuarto. El mal partido en defensa de los hispalenses les dejó sin partido en el último periodo. Todo fue coser y cantar para los vitorianos, que incluso se dieron el gusto de apalizar a su rival. Al final, sonrojo y paliza en el Buesa Arena (101-65). San Emeterio se erigió como el hombre del partido con 21 puntos y 26 de valoración. Una derrota dolorosa, tan esperada como impropia.
