Tremenda sorpresa la que se llevaron los doctores de una rusa de 80 años al descubrir que tenía una aguja de tres centímetros alojada en el cerebro.
¿Cómo y cuándo había llegado hasta allí el objeto metálico? El Ministerio de Salud de la región de Sajalín ha detallado que la aguja fue encontrada en el lóbulo parietal izquierdo de la mujer, que posiblemente la tiene desde que era pequeña.
El hallazgo se produjo durante unas pruebas por otros temas de salud, pero enseguida hubo algo que llamó la atención del equipo médico.
Una de las explicaciones que se ha dado a este hecho es durísima: sus padres o alguien muy cercano intentaron asesinarla. Esta práctica para deshacerse de los bebés era dramática, pero no aislada en tiempos de hambre y penurias. Si no se podía alimentar a otro hijo, mejor no tenerlo, pero abortar no era una opción hace ochenta años, por lo que se tomaba la extrema solución de matar niños sin dejar pruebas que conllevasen problemas legales. En esos tiempos, era casi imposible detectar un hecho como este.
La señora, tan sorprendida como triste ahora, no ha sufrido nunca problemas derivados del objeto en su cerebro. Y es por ello que no se le extirpará. Si ha sobrevivido con la aguja durante ocho décadas ¿por qué arriesgarse a retirarla ahora?
