Es el típico vídeo con el que la risa se te acaba contagiando, así que no intentes evitarlo. Es un bautizo, dentro de una Iglesia, que nada debería tener de desternillante. Pero es que el nuevo cristiano es un joven de veinte años y su padrino, un chico «con mucho arte», según lo califican en los comentarios.
En este bautizo no falta detalle. Hay cura, pila y padrinos. Lo que sucede es que, a diferencia de lo que suele ser habitual, quien recibe el sacramento está más crecidito de lo normal.
En una semana el vídeo supera ya los 5,3 millones de reproducciones. Y aunque muchos de los comentarios son en tono guasón, siguiendo el momento cómico de las imágenes, otros lo consideran una falta de respeto y se inicia cierto debate: «Pues no le veo la gracia en ninguna parte. Es algo sagrado y no debería ser motivo de risas, ni mofas. Y el sacerdote, como mínimo, expedientado», escribe un internauta. Hay respuestas duras, que arremeten contra delitos cometidos por religiosos, y otras más livianas, como esta: «Da risa porque no es común ver a un joven bautizarse y menos que el padrino lo cargue».
