Noche de auténtico disfrute para todos los carnavaleros. Y de buenas comparsas.
El Perro Andalú fue la primera en aparecer escena con una actuación imponente e interpretación soberbia. Vinieron con dos grandes letras, emocionó la dedicada a un niño enfermo y también la crítica al Partido Socialista andaluz.
Pero el momento de mayor emoción de la noche vino de la mano de Los Mafiosos. Los dos pasodobles junto a una tanda de cuplé llena de ingenio y un popurrí sumaron una actuación más que perfecta. Volvió la mejor versión de Aragón.
La otra gran comparsa de la noche fue la de Tino Tovar. Al que notamos un pequeño bajón en el nivel de los pasodobles con respecto a los que trajo en cuartos. Aún así, una vez más impresionaron con un completo repertorio.
El cuarteto de los niños volvió a desplegar sus mejores armas para ganar este año en su regreso el primer premio. Muy bueno el tema libre. Gran capacidad de improvisación. Gracia fresca y joven. Estilo propio que se agradece en la modalidad.
Los dos coros de la noche se caracterizaron por el gran nivel en letras y fuerza vocal. A la que ya nos tienen acostumbrados desde hace bastantes años.
