Ni UES ni ‘Campañas de frío y calor’

Hace un año, Unión Portuense presentó en el pleno del Ayuntamiento una moción que solicitaba un cambio significativo en la atención a las emergencias sociales en nuestra ciudad. La propuesta, centrada en la creación de una Unidad de Emergencia Social (UES), buscaba garantizar una atención inmediata, integral y humana ante situaciones de vulnerabilidad o riesgo social, las 24 horas del día y los 365 días del año.
La realización de las campañas, no es solo una cuestión de solidaridad sino también de dignidad y justicia social Este recurso, concebido como un sistema de respuesta ágil, tenía como objetivo atender emergencias tanto en la vía pública como en domicilios particulares. Su diseño incluía la colaboración activa con la Policía Local, Protección Civil, agentes sociales y asociaciones, formando un frente común ante las necesidades más urgentes de la población. Entre las problemáticas destacadas, la moción ponía especial énfasis en las campañas de frío y calor, enfocadas en la protección de personas sin hogar y en situación de exclusión social durante los meses más extremos: diciembre, enero, febrero, julio y agosto.
Un año después, es necesario reflexionar sobre el avance respecto a la propuesta ¿Ha dado el gobierno de Germán Beardo algún paso firme en este sentido? La realidad que enfrentan muchas personas vulnerables en nuestra ciudad sigue siendo alarmante. 
Las olas de frío y calor, cada vez más intensas, agravan la precariedad de quienes viven en la calle. Así, con las campañas, se podría dotar de personal y material necesario en un espacio donde las personas en situación de calle que requieren respuestas inmediatas puedan cobijarse temporalmente ante temperaturas extremas como, por ejemplo, una zona específica en un pabellón deportivo municipal.
El compromiso por parte del Gobierno del PP no solo debería limitarse a reconocer la importancia de la propuesta, sino también a dotarla de recursos, presupuesto y personal cualificado para convertirla en una realidad, lo que parece bastante alejado tras el recorte de 1 millón de euros sufridos en lo que llevamos de mandato en el área de Bienestar Social. Mientras tanto, quienes más necesitan ayuda continúan enfrentándose a un sistema que no les brinda soluciones efectivas.
La realización de las campañas, no es solo una cuestión de solidaridad sino también de dignidad y justicia social. Y con la creación de la UES se podría responder de manera más eficiente a las necesidades inmediatas de los ciudadanos, al tiempo que establecería una base para abordar problemáticas estructurales. 
En definitiva, un año después de la moción, el mensaje es claro: Ni UES ni ‘Campañas de frío y calor’. Ahora, más que nunca, es fundamental que los responsables del gobierno de Beardo tomen medidas concretas para garantizar que nadie quede realmente atrás en situaciones de emergencia social.