El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha mostrado "sorprendido" y ha desmentido que haya habido presiones dentro de la reunión del G-20 para que España aclarara cuanto antes la fórmula y la cantidad necesaria para rescatar al sistema bancario. También ha negado que "nadie haya hablado" en la cumbre internacional de la posibilidad de un segundo rescate.
"Los más interesados en resolver a la mayor celeridad esto somos nosotros y aquí no ha habido ni una palabra sobre eso", ha dicho Rajoy sobre el rescate de la banca en una comparecencia posterior a la cumbre del G-20 en Los Cabos.
No obstante, Rajoy ha mantenido que hay que esperar a este jueves, día 21, para saber cuáles son los resultados de las evaluaciones de las agencias encargadas de analizar las cuentas de los bancos españoles y que "ahora" lo que tiene que negociar el Ejecutivo que preside con las autoridades europeas es el memorándum para decidir cómo se formula esa ayuda financiera para la recapitalización de la banca.
"Estamos pendientes de saber el instrumento que vamos a utilizar, porque puede ser el FEEF o del ESM o puede ser otro distinto", ha comentado Rajoy antes señalar que "lo importante es que haya voluntad política".
Al ser preguntado por esta cuestión, el jefe del Ejecutivo no ha querido precisar a qué se refería cuando ha abierto la opción de un mecanismo para solicitar el rescate de la banca española distinto a los fondos permanente o temporal. "No voy a entrar en disquisiciones técnicas porque no me corresponde a mí", ha respondido.
El presidente ha sido cuestionado directamente sobre la posibilidad de que España tenga que solicitar un segundo rescate --como apuntaban la madrugada del miércoles algunos medios de comunicación anglosajones--, una cuestión que ha despejado remitiéndose a sus palabras sobre la ayuda financiera para la banca. "Nadie ha hablado de eso", ha dicho sobre la posibilidad de un segundo rescate.
CENTRARSE EN EL DÍA A DÍA
Rajoy ha mostrado igualmente su "satisfacción" por el apoyo "claro y firme" que el G-20 ha dado a las políticas y medidas adoptadas por el Gobierno español y fundamentalmente por la "recapitalización bancaria". Sobre esto último, ha insistido en que la ayuda a la banca se realizará desde el FROB y que serán las entidades financieras las que tendrán que devolver el crédito.
El jefe del Ejecutivo ha defendido centrarse en el "día a día" y no atender a las variaciones de la prima de riesgo. Para ello, ha puesto de ejemplo la subida de la prima de riesgo el día siguiente de las elecciones en Grecia y ha subrayado que "los fundamentos de la economía española están muy por encima de la prima de riesgo y de los precios que se están pagando ahora" en los mercados de deuda.
BALANCE DE LA CUMBRE
Rajoy ha recalcado varias veces a lo largo de su intervención el balance "satisfactorio" para los intereses de España en esta cumbre del G-20. "Esta reunión de Los Cabos no la olvidaré nunca por su espíritu constructivo", ha dicho.
El jefe del Ejecutivo se ha felicitado por el apoyo mostrado a varias propuestas defendidas por España "para avanzar hacia la integración fiscal y financiera". Así, en la declaración final se anima a la eurozona a "dar pasos" para avanzar hacia esa unión bancaria y se reconoce que una "mayor integración fiscal" llevará a la "moderación" de costes de la financiación de la deuda soberana.
Igualmente, ha destacado el "llamamiento claro y rotundo" que el G-20 ha hecho para "evitar todas las formas de proteccionismo" y propiciar así el comercio mundial. En este punto, ha recalcado que se iniciarán conversaciones para lanzar un tratado de libre comercio entre la UE y EEUU.
De manera especial ha destacado el encuentro en el que ha estado presente el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que ha definido como "muy constructivo" y ha recalcado la "postura de unidad" que ha habido. "De aquí salimos todos unidos con el mismo objetivo que es recuperar el crecimiento y el empleo", ha dicho.
En este sentido, ha subrayado la necesidad de un "esfuerzo conjunto" para lograr una recuperación económica mundial que hace falta a todos los países.