El delegado del Gobierno en Andalucía, Lucrecio Fernández, ha defendido que "lo mejor que podría pasarle a la democracia española es que la actividad política de Vox desapareciera".
Es la valoración política que ha realizado el máximo responsable del Gobierno de España en Andalucía tras conocer que la Fiscalía investigará a la presidenta de Vox Madrid, Rocío Monasterio, por un presunto delito de odio en el marco de sus declaraciones sobre los menores extranjeros no acompañados durante un acto de campaña electoral en un barrio de Sevilla.
Fernández, que ha asistido en Jaén a la toma de posesión del nuevo responsable de la Guardia Civil en la Comandancia de Jaén, ha realizado ante los periodistas una valoración "absolutamente positiva" de la iniciativa de la Fiscalía, independientemente de la decisión final que adopte el poder judicial.
"Vox es una fuerza política que desde que apareció en el escenario ha sido una fuerza enormemente tóxica para la democracia española", ha dicho Fernández y ha añadido que Vox "con mentiras se ha dedicado a hacer saltar por los aires consensos de convivencia largamente asentados y que ha costado mucho construir en la democracia española tras la promulgación de la Constitución española".
Ha subrayado que "romper la convivencia, alentar el odio, la xenofobia, el machismo, desde luego no puede ser bien recibidos", de ahí que haya incidido en el beneficio que conllevaría para la democracia española el cese de la actividad política de Vox.
