Viruji

El futuro duque de Alba no puede inscribir en el registro a su hija con once nombres

Según el Registro Civil, no se puede inscribir a una niña con once nombres, ya que no ha permitido tramitar el registro de Sofía Fernanda Dolores Cayetana Teresa Ángela de la Cruz Micaela del Santísimo Sacramento del Perpetuo Socorro de la Santísima Trinidad y de Todos Los Santos, hija de Fernando Fitz James Stuart, heredero […]

Según el Registro Civil, no se puede inscribir a una niña con once nombres, ya que no ha permitido tramitar el registro de Sofía Fernanda Dolores Cayetana Teresa Ángela de la Cruz Micaela del Santísimo Sacramento del Perpetuo Socorro de la Santísima Trinidad y de Todos Los Santos, hija de Fernando Fitz James Stuart, heredero del ducado de Alba, y su esposa, Sofía Palazuelo.

No hubo ningún problema para el bautizo de la pequeña, que se celebró en Sevilla incluyendo un gran banquete familiar posterior al acto religioso. El inconveniente llega porque de acuerdo a las leyes, no se pueden registrar más de dos nombres por persona. «En la inscripción se expresará el nombre que se da al nacido, si bien no podrá consignarse más de un nombre compuesto, ni más de dos simples«, impone la ley sobre nombre y apellidos y orden de los mismos.

La normativa que limita los nombres ha ido cambiando para adaptarse a la evolución de la sociedad, pero sus detalles básicos son inamovibles y se pueden consultar en el Boletín Oficial del Estado.

Esta tradición de nombres compuestos tan largos es típica de la «alta sociedad» para rendir homenaje a los antepasados del recién nacido. De sobra es conocido Felipe Juan Froilán de Todos los Santos de Marichalar y Borbón, hijo mayor de la infanta Elena de Borbón y de Jaime de Marichalar. Y antes de él, la famosa Cayetana, duquesa de Alba, cuyo nombre completo era María del Rosario Cayetana Paloma Alfonsa Victoria Eugenia Fernanda Teresa Francisca de Paula Lourdes Antonia Josefa Fausta Rita Castor Dorotea Santa Esperanza Fitz-James Stuart y de Silva Falcó y Gurtubay.

En otros países no existen estas limitaciones para inscribir a los niños, de ahí que, por ejempo, el bajista de la banda estadounidense Metallica se llame Roberto Agustín Miguel Santiago Samuel Trujillo Veracruz.

Y tampoco habría existido en este problema en Cádiz, como decían Los tintos de verano, una de las primeras chirigotas de Juan Carlos Aragón: «No le pongáis más nombres guays a los chiquillos y de una vez se enteráis de que aquí estamos en Cadi y tor mundo se llama quillo».

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN