La Junta de Andalucía mantiene activa la fase de preemergencia del Plan de Emergencias ante el riesgo sísmico en la provincia de Granada dado que la situación sigue siendo la misma que cuando se activó el pasado 26 de enero (temblores sin daños personales ni estructurales) pero ha intensificado la coordinación.
Según ha explicado a Efe la responsable del servicio de emergencias 112 de Andalucía, Pilar Limón, aunque la serie sísmica sigue activa y son ya cinco los terremotos de más de 4 grados de magnitud registrados desde el sábado pasado en Granada y su área metropolitana, ninguno de ellos ha ocasionado víctimas ni daños materiales relevantes, por lo que el Plan de Emergencia se mantiene en la fase de preemergencia.
En esta fase, los fenómenos sísmicos se producen sin ocasionar víctimas ni daños materiales relevantes, por lo que desde un punto de vista operativo, el nivel se caracteriza fundamentalmente por el seguimiento instrumental y el estudio de dichos fenómenos, así como por el proceso de información a los órganos y autoridades competentes en materia de Protección Civil y a la población general.
No obstante, la Junta está haciendo un seguimiento exhaustivo de la situación, hay un grupo operativo las 24 horas para poder reaccionar ante cualquier imprevisto y se ha intensificado la coordinación tanto a nivel local como autonómico y nacional.
En Andalucía, una comunicad de cierto riesgo sísmico que ya vivió en 2013 una larga serie sísmica en Torreperogil (Jaén), no ha sido necesario en los últimos tiempos ir más allá de la actual fase de preemergencia del plan.
Desde los terremotos de 1979, en los que la provincia de Granada registró numerosos temblores durante seis meses consecutivos -ninguno de magnitud superior a 5-, "todo ha avanzado mucho, desde la capacidad de respuesta al conocimiento y actuación de los operativos de emergencia y los niveles de coordinación", explica Limón.
También la normativa sismorresistente y el conocimiento de la población en cuanto a las conductas de autoprotección.
"Es normal sentir miedo e inseguridad, pero es importante mantener la calma y la serenidad porque son las mejores aliadas para tomar decisiones que nos permitan protegernos", señala.