Granada

Las comuniones se multiplican en grupos más pequeños, con celebraciones también reducidas

Segú el Arzobispado de Granada, donde antes se celebraba una primera comunión ahora se organicen dos o tres con grupos más pequeños

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  • Primera Comunión.

Las primeras comuniones y las confirmaciones han comenzado a celebrarse este mes de abril, en un año marcado por las restricciones derivadas de la gestión de la pandemia del coronavirus, que ha llevado a que las parroquias de la archidiócesis de Granada hayan visto multiplicado el número de estas celebraciones religiosas.

En concreto, la limitación de aforo, según las fuentes consultadas por Europa Press en el Arzobispado de Granada, ha llevado a que, donde antes se celebraba una primera comunión ahora se organicen dos o tres con grupos más pequeños, que varían según el espacio de la parroquia.

Son grupos que no suelen superar los diez niños, y en los que también hay un menor número de invitados, siempre a expensas de cómo evolucionen las restricciones por el covid-19 en mayo. Además del aforo limitado, es obligatorio el uso de la mascarilla, y el mantenimiento de la distancia de seguridad, con gel hidroalcohólico a disposición de los asistentes.

En el marco de las actuales limitaciones, cada párroco, en cualquier caso, es el responsable de la organización de estas ceremonias, según han agregado las citadas fuentes. Se vuelve en ellas a cierta austeridad, yendo a la esencia de su significado, más allá de las celebraciones sociales que las siguen, que también se ven limitadas en estos tiempos por las restricciones estipuladas por las autoridades sanitarias.

En los salones de celebraciones, antes de la crisis del coronavirus, se observaba más facilidad entre las familias para hacer reservas para los convites para un periodo que iba desde final de abril hasta el principio de junio, principalmente en mayo. Ahora hay menos anticipación y más consultas y peticiones de información, dirigidas incluso para los meses del verano, dado el espaciamiento en el tiempo con el que se van programando las comuniones.

Muchos "no se atreven a reservar", señalan a Europa Press desde un restaurante de la zona de la Carretera de la Sierra, en Granada capital, en alusión a la actualización semanal de las restricciones para los municipios estipuladas por las autoridades sanitarias contra el coronavirus.

Ello influye por un lado en el aforo, que si la sala es pequeña se ve aún más reducido de lo permitido por la necesidad de la distancia de seguridad entre mesas, y en la movilidad entre municipios, algunos perimetrados según sus tasas de incidencia de la covid-19. Es, en resumen, "un poco complicado", y las salas van informando a los clientes de las modificaciones que han podido introducirse respecto del momento de la reserva cuando se acerca el fin de semana de la celebración, añade esta fuente.

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