Siempre se ha dicho que los dolores de parto son los peores que soporta el cuerpo humano a lo largo de toda una vida. A pesar de ello, son muchos los hombres que parecen no entenderlo. De ahí que cada vez esté más de moda hacer sufrir a los futuros papás.
Unos sensores se pegan en el abdomen de los valientes que se atreven a probar y descargan una serie de impulsos eléctricos que actúan sobre los músculos del estómago con el objetivo de simular las contracciones.
Los primeros en probar, hace unos años, fueron los chinos. Pero estas máquinas se utilizan ya en casi todos los rincones del mundo. Y las redes sociales se están llenando de vídeos en los que los vemos a ellos sufrir…
Solo son algunos ejemplos de los muchos que encontramos navegando por Internet. Ahora los hombres ya pueden saber lo que sufrimos las mujeres en el momento del parto. La diferencia… que ellos después de este sufrimiento, no tienen como recompensa a un pequeño retoño entre sus brazos.
