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Jaén

La Alcantarilla vuelve a disfrutar de su Estrella

Nuestro Padre Jesús de la Piedad y la Virgen de la Estrella salieron de su casa hermandad de Jaén

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Procesión de la Estrella en Jaén.

Tiene algo especial la Semana Santa en el barrio de la Alcantarilla. Tal vez sea la pericia extrema que muestran los costaleros para hacer pasear a sus imágenes por las estrechas calles de uno de los barrios más antiguos de la ciudad o cómo se vuelcan los vecinos de esta zona, sobre todo los jóvenes, con su cofradía. Lo cierto es que ayer todo acompañó para que tanto el Cristo de la Piedad como la Virgen de la Estrella salieran a la calle para realizar su estación de penitencia.

No cupo un alfiler en las aceras de alrededor de la casa hermandad de esta cofradía, cuyos capataces tuvieron que ir desalojando gente de los laterales para evitar susto alguno. Las estampa de una plaza abarrotada hizo que la salida fuese espectacular, con ambas imágenes recibieron una canción como ofrenda aún sin salir de su casa.

Una vez que el sol hubo bañado el rostro del Cristo de la Piedad comenzó a sonar el himno de Andalucía interpretado por la Agrupación Musical La Estrella, sin cuyo ritmo los costaleros no habría sabido hacer la maniobras milimétricas necesarias para sacar de la Alcantarilla una de las imágenes más queridas por sus vecinos. Sabían el valor sentimental e histórico (pues la imagen data del siglo XVII) de lo que tenía sobre sus hombros y dieron una nueva clase magistral.

De igual nivel fue la que ofrecieron los portadores de la Virgen de la Estrella que, al igual que ocurrió con su paso predecesor, recibió una lluvia de pétalos a pocos metros de empezar el tramo más complicado de su itinerario. Las flores cayeron desde la torre de la iglesia conventual de la Purísima Concepción, arrojadas por las monjas que contaron con unas vistas del cortejo absolutamente privilegiadas.

Desde allí pudieron ver las principales novedades que presentó el mismo. El paso del misterio lució una nueva primera fase que, todavía sin labrar, es obra del taller de Enrique Luque. Por su parte, la Virgen de la Estrella estuvo arropada por un nuevo manto de terciopelo azul y además pudo verse que la candelería del paso ha sido recientemente restaurada. 

La temperatura ayudó a que la mayoría de los vecinos de la Alcantarilla aguantasen al sol del mediodía para acompañar en la salida a una cofradía que no estuvo sola en ningún momento del recorrido, pues a su llegada a San Ildefonso ya se contaban con miles los que la esperaban, de igual modo que ocurrió hasta su paso por la carrera oficial de vuelta a su casa, al calor de su barrio, donde pronto volverá a estar de nuevo la Estrella de la Alcantarilla.

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