Entre la derrota de UPyD en las elecciones andaluzas y la que ha caído a nivel interno en el partido últimamente, presentarse a la Alcaldía puede verse como un ejercicio cuanto menos de valentía...¿Qué le empujó a hacerlo? 

—Hace cuatro años estuve con Martín de la Herrán en la lista. Fue mi primera experiencia en el campo de las elecciones municipales. Luego ya me aparté un poco del partido, y a raíz de las últimas primarias que hubo al ver que se habían quedado desiertas di el paso adelante;  ellos me lo propusieron y me puse a disposición del partido. Creo que puedo aportar mucho con mi experiencia a Jerez.


Es maestro jubilado tras dedicarse a la docencia más de 30 años. ¿Qué puedes aportar a la política aparte de su experiencia?
—Creo que todo ser humano tiene algo de político puesto que reaccionamos siempre frente a las injusticias y las situaciones que no están acorde con las políticas sociales. Es una inquietud que yo tenía. El deporte es una de mis pasiones y siempre me hubiese gustado haber sido alguna vez concejal delegado de deportes pero no me podía presentar yo solo. En cuanto a lo que puedo aportar, pues un poco el conocimiento de la ciudad puesto que yo me he criado en el barrio de Santiago y he desarrollado aquí en Jerez toda mi vida. He colaborado con  instituciones y colectivos, como el Club Nazaret, y  asociaciones de vecinos,  he sido delegado provincial de tenis... tengo ciertos conocimientos que le pueden venir bien a la ciudadanía.

¿Cuánto lleva militando en UPyD?

—Me afilié en 2010 a raíz de una inquietud que tuve. Con la edad que tenía, y visto lo visto, me di cuenta de que el bipartidismo no me enganchaba ni me decía nada. Entonces me informé porque para mi es muy importante el ideario del partido, los valores, lo que defiende, y la verdad es que en el manifiesto fundacional de UPyD encontré todas las respuestas que necesitaba.


A priori son las elecciones más abiertas de la historia ¿Cree  que  esto le puede venir bien a UPyD?
—Con otros compañeros, sobre todo con los partidos más minoritarios, hemos coincidido en eso, en que quizás sea la vez en la que el abanico esté más abierto. Ahora mismo la ciudadanía no puede decir que no tiene donde elegir. Cada uno llevamos nuestras propuestas y todos persiguen el bien de la ciudadanía. El Ayuntamiento necesita mucha más transparencia, hay que abrir las ventanas, airearlo y darle un giro.


¿Qué propuestas lleva UPyD  a las municipales?
—A nivel económico, la estabilidad presupuestaria: no se puede gastar más de lo que se ingresa,es decir, racionalidad en el gasto; no subir los impuestos dada la crisis y la depresión que tenemos; la revisión del catrastro es importante; otra muy interesante es declarar al centro histórico de Jerez Patrimonio de la Humanidad. Habría que pelearlo a medio y largo plazo, pero no sería solamente  un medio en sí mismo sino que atraería inversiones a Jerez de las mismas administraciones y es un valor que tenemos, que hay que  impulsar y dinamizar al igual que la industria de un turismo sostenible y de calidad. Pero para que la gente venga tienen que encontrarse con una  ciudad limpia y buen estado, atractiva y segura.  El apoyo a las pymes y emprendedores es  también es muy importante. El Ayuntamiento nunca puede poner trabas a la creación de empleo. El otro  día me contaba un conocido que llevaba más de año esperando el permiso para poder abrir una carnicería.

A nivel de Ayuntamiento, el ERE y la concesión administrativa del agua han sido lo más cuestionado al Gobierno del PP. La mayoría de los partidos que ahora concurren a las elecciones se  han comprometido a readmitir a los trabajadores si un juez les da la razón en las demandas individuales, lo cual está ocurriendo. ¿UPyD también lo haría si gobernara?
—El Ayuntamiento soportaba una gran carga en número de empleados. Una ciudad parecida como Gijon subsiste y sobrevive con 900 empleados municipales y Jerez ha llegado a tener más de 2.000, pero una vez que la situación económica es la que hay, yo soy partidario siempre de mantener los puestos de trabajo. Y si, como dicen las últimas sentencias, se siguieron criterios arbitrarios por parte del Ayuntamiento, entre readmitir o indemnizar, lo último es un costo añadido a las maltrechas arcas municipales, esa  deuda que tenemos de mas de mil millones que heredarán  nuestros hijos y nietos.  


El PP, sin embargo, dice  que lo peor ha pasado, que el Ayuntamiento se ha “normalizado”
—A mi me cuesta creer eso porque con los ingresos que tenemos que pagar todavía, los gastos de la Seguridad Social, PIE. IRPF, prestamos ICO, el ERE. ¿Por qué una empresa como la del agua la privatiza y por qué las otras las deja dentro del organigrama municipal?80 millones de euros es una tesorería fácil. El agua es un bien publico y no se puede comercializar con él. Por eso, otras de las propuestas que hacemos es la remunicipalización del agua. En su defecto, como sabemos que va a ser muy complicado, proponemos establecer un seguimiento de la factura de la calidad del agua y un compromiso, el mismo que el Gobierno debería haber arrancado en su momento a la concesionaria, que la misma empresa  se haga cargo de las familias que no pueden costearlo.

¿Ha habido contacto con Ciudadanos?

—El único que hemos tenido ha sido para hacernos una foto todos los candidatos y aleatoriamente me tocó cerca del representante de ciudadanos. Alguien llegó a decir eso de que “después dicen que no se entienden”. A nivel municipal no hemos tenido ningún contacto. En su día me pareció acertado que no nos fusionáramos, aunque eso después ha traído consecuencias en afiliados y simpatizantes, pero creo que somos dos partidos que tenemos cierta distancia en la forma de entender los problemas y solucionarnos.


-¿Se ve en el Ayuntamiento tras los resultados del 24 de mayo?
Tengo confianza e intuición. Yo confío en lo que he sembrado en 61 años en las personas que me han conocido y me conocen. No voy a enriquecerme, ni  a adquirir fama ni prestigio porque lo que me he ganado lo tengo ya y no necesito más. Podemos aportar mucho; es necesario dar un vuelco a la forma de gobernar de estos últimos treinta y tantos años.


¿Ha recibido alguna instrucción desde arriba?
—Los correos que me mandan todos son de ánimo y para hacerlo lo mejor posible.
 

¿Cómo va a ser la campaña de UPyD?

—Va a ser en plan pobre (tienen 180 euros de presupuesto), pero tiraremos de imaginación y de inventiva. Queremos cerrar la campaña con algo sonado entre los simpatizantes los amigos y las personas que vengan. Igual hasta me atrevo a dar una pequeño concierto,  como hacía con los niños; la guitarra me ha salvado en muchos momentos de mi vida.