Mover la economía

Me comentaba días pasados Javier Lobo, el presidente de la Asociación de Comerciantes del Sur, que en Jerez ya se había tocado techo en cuanto a grandes superficies hace referencia y que ha llegado la hora de apostar por inversiones que generen economía, grandes empresas que se establezcan en la ciudad, grandes industrias que sean capaces de absorber mano de empleo y que esa mano de empleo después invierta en los negocios de la ciudad. Lo que se necesita, en definitiva, es mover la economía y eso es lo que se pretende hacer en el último trimestre del año, aunque sea a través de los servicios, del ocio y del turismo. Poner en valor la Fiesta de la Vendimia, que jamás debió perderse porque para eso Jerez tuvo el privilegio de poder   tener dos ferias, en el mes de septiembre; dinamizar las fiestas patronales, la de La Merced y de San Dionisio que coinciden en un espacio de quince días y, después, las zambombas que no serán lo que fueron pero que sirven para que el mercado de la hostelería reciba unos dividendos que tan difíciles de encontrar están. Por todo eso,  a la mesa del delegado Camas han llegado dos ofertas diferencias de la Fiesta de la Vendimia. Aquella de llevar la fiesta de la tapa hasta el Parque González Hontoria y aquella otra de hacer una feria en pleno centro de la ciudad en el mes en el que el vino nuevo toma vida. ¿Qué se hace? A lo mejor habría que plantearse no llevar la Vendimia de nuevo al Parque, sino ver qué se hace con el Parque a lo largo de todo el año. Porque pasar por allí y verlo completamente vacío de vida humana, temiendo casi entrar porque no sabes lo que te vas a encontrar es una pena, penita, pena y me hace recordar aquellos cacharritos que se quedaban todo el año, aquellos bares que le daban vida más allá de los días feriados. Algo hay que hacer para que el Parque recobre su vida y algo hay que hacer para que Jerez se mantenga en oferta turística permanente, al menos hasta que otros dimanantes económicos no aterricen en esta ciudad que busca por donde sea su modo de supervivir y de acabar con esa lacra que es el paro, que de nuevo ha vuelto a ponerse en números vergonzantes.