A fecha de hoy, las urbanizaciones “Mirador de la Bahía y Doña Lola, siguen con agua de obra y soportando reiterados e imprevisibles cortes que hacen insostenible la habitabilidad de los inmuebles, ubicados según el Ayuntamiento en la nueva zona de referencia de la ciudad”.
El problema, según los denunciantes, radica en que dicho depósito, realizado por la empresa Agropeninsular, “propietaria de la parcela edificable”, fue terminado en 2003 y Emalgesa “no lo recepcionó, aún estando todo supeditado a convenio ante notario, en el que, con la mediación del Ayuntamiento, recogía el compromiso de dotar y proveer de los suministros de agua y luz a toda la nueva zona de edificación que comprenden varios complejos”.
En marzo de 2007, "se entregan las licencias de primera ocupación a la promoción Mirador de la Bahía, bajo la promesa de una solución inmediata al asunto de los suministros (luz y agua)”.
Según las partes, “al modificarse la ley de sanidad pública y ambiental, el depósito no reunía las condiciones mínimas exigibles y necesitaba de unas mejoras acordes a la nueva normativa, que en este momento, ni se han realizado, ni se cumplen”, aunque ese último extremo, parece no importar a ninguna institución”.
Fuerte hedor
Los denunciantes destacan que, el suministro para Doña Lola, Mirador de la Bahía y CC Puerta Europa, “parte de ese depósito que los vecinos desconocemos si es agua potable y si se encuentra adecuado a las condiciones de salubridad pública exigibles”. De hecho, añaden, “creemos que el agua no es apta para el consumo y desprende un fuerte hedor a agua estancada”.
Pero, “lo más increíble es que la infraestructura que habilita el suministro de agua a las citadas urbanizaciones, deriva desde ese depósito a través de unos tubos de pvc ridículos y de unas medidas insuficientes para soportar el abastecimiento de la demanda exigible”. Sólo en Mirador de la Bahía “vivimos actualmente unos 217 vecinos y los aljibes se llenan a través de unos tubos que van por la calle y que no dejan más de un dedo de caudal de agua sin presión alguna”.
Por ello, “hemos mantenido numerosas reuniones con las partes, con sin concretarse hasta ahora, la institución u organismo encargados de acometer esos servicios de adaptación y mejora del depósito”.
También “hemos instado al Ayuntamiento para que ejerciera como mediador, y el asunto sigue empantanado”. Mientras, “seguimos poniendo en peligro nuestra salud, con cada vez más cortes de abastecimiento sin previo aviso que suelen durar alguno, hasta varios días, poniendo en peligro tanto las instalaciones como los sistemas de presión”.
Agropeninsular
Los denunciantes aseveran que muchas familias “viven sin saber si el agua que sale de sus grifos es apta o no para su consumo, después de pasar por varios depósitos de las constructoras y viniendo de una instalación no adaptada, ni autorizada por los organismos oficiales”.
Por su parte, Agropeninsular “no se hace cargo del coste de las obras porque manifiesta que ya entregó el depósito y que Emalgesa argumenta que no procede a la recepción, porque no reúne los mínimos exigibles”. Y el Ayuntamiento, “hace caso omiso, y otorga licencias de habitabilidad y primera ocupación a la segunda fase hace unos meses”.
