Jerez

¿La última Navidad sin El Gallo Azul?

Aunque en la empresa de Gonzalo Assiego son reacios a dar plazos, la reapertura del mítico local de la calle Larga podría ser una realidad el próximo verano

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  • El Gallo Azul lleva más de dos años cerrado al público. -

Mientras en La Vega intentan resolver a marchas forzadas el problema de licencias que les ha obligado a echar el cierre días después de reabrir al público completamente renovados por no tramitar los permisos necesarios en Urbanismo, en El Gallo Azul, otro peso pesado del centro, y uno de los locales más míticos de Jerez, el pasado octubre se retomaron unas obras que tienen un plazo de ejecución de ocho meses. Si todo va bien, por tanto, y no hay más contratiempos, la presente será la última Navidad sin este establecimiento abierto al público, que jerezanos y visitantes podrán recuperar con aires más renovados que nunca. Con el que está a punto de acabar, ya son dos años y medio con este local de restauración fuera del circuito de la gastronomía local jerezana, que atraviesa su época dorada con dos estrellas Michelín gracias a los restaurante LÚ, Cocina y Alma y Mantúa. No han trascendido muchos detalles, pero los que lo han visto avanzan que el nuevo Gallo Azul no tiene nada que ver con lo que estábamos acostumbrados. Era en diciembre de 2016 cuando el empresario malagueño Gonzalo Assiego alcanzaba un acuerdo para  el traspaso del negocio con el empresario hostelero Carmelo López, quien regentaba la propiedad del inmueble de Aníbal González junto a otros socios con idea de abrir a mediados de 2017.  

Su intención era que los jerezanos volvieran a disfrutar este emblemático negocio lo antes posible, pero no ha podido ser y su reapertura se está haciendo de rogar.  Tampoco quiere decir que hayan estado de brazos cruzados, pero esta vez, aunque desde el entorno del empresario prefieren no dar plazos, mucho tienen que complicarse las cosas para que su regreso no sea una realidad el próximo verano. En su caso, con algún que otro parón a sus espaldas, también por problemas de licencias con Urbanismo, el local de seis plantas está siendo objeto de una profunda reforma integral que no ha estado exenta de inconvenientes.

Los planes de Assiego también se han ralentizado por la adquisición de la casa aledaña al Gallo Azul (donde se ubicaba la zapatería Pilar Burgos) para ganar más espacio. Este empresario es muy conocido por sus chiringuitos en Bali, Indonesia, especialmente el  bar de playa La Plancha, considerado uno de los mejores del mundo. Su apuesta personal por El Gallo Azul, al que quiere darle su impronta, respetando siempre la fachada, a la que no se le puede tocar y donde radica su principal atractivo, se dejará ver desde el primer momento en el que la clientela más fiel ponga un pie en el establecimiento. Expectación Y es que incluso clausurado, este edificio sigue siendo el favorito para las fotos de souvenir de turistas de sus viajes a Jerez y de los propios jerezanos, que llevan demasiado tiempo echando de menos a El Gallo Azul. En cualquier caso, aunque la espera no ha terminado, parece que el próximo 2020 será por fin el año de su vuelta para sumarse de nuevo  a la oferta hostelera por todo lo alto ofreciendo una atractiva carta de tapas, restaurante e incluso una terraza de copas al aire libre en una de sus últimas plantas.

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