«La gente está fatá«. Esa es la conclusión más lógica que podría sacarse después de leer esta noticia. Un hombre en Florida fue pillado montando en una vaca marina (también conocida como manatí) en un arroyo local y acabó arrestado tras retar a la policía a que lo arrestara. Los testigos que observaban la escenita de este hombre con un grupo de manatíes se mostraron bastante indignados con el comportamiento de James Roy Massengale Jr, de 47 años al verle nadar con ellos.
Le dijeron que acosar así a estos animales era algo ilegal, ya que se trata de una especie protegida, pero este buen señor, lejos de rectificar respondió que, de hecho, no es que sólo estuviera nadando con las vacas marinas sino que estaba montando una como si de un flotador se tratara.
Este hombre había estado nadando en un arroyo en Islamoroda cuando los testigos lo vieron y decidieron llamar a la policía. Cuando llegaron, los agentes atestiguaron que le encontraron «acercándose, tocando y montado en lo alto de los manatíes del arroyo».
Un oficial de la Comisión para la Vida Salvaje de Florida le informó de que recibiría una orden para comparecer en el juzgado con las acusaciones de molestar, acosar, hostigar o perturbar una vaca marina.
Fue entonces cuando Massengale dijo que no se molestaría en comparecer y empezó a gritar a modo de desafío: «¡Llevadme a la cárcel, llevadme a la cárcel!»
Así que los agentes lo llevaron a la cárcel.
Massengale fue retenido con una multa de 25.000 dólares por acosar a los manatíes, pero principalmente por no cooperar con la policía.
