El Skoda Octavia celebra 60 años desde que empezó a producirse: en enero de 1959, los primeros ejemplares de este modelo legendario salieron de la cadena de montaje de la planta de Mladá Boleslav. A mediados de la década de los 90, la primera generación del Octavia de la era moderna continuó el legado del popular modelo compacto.
El sonoro nombre ‘Octavia’ enriqueció por primera vez la gama de modelos de Skoda hace exactamente 60 años. No es coincidencia que el nombre derive del latín “octavia”. Significa “octavo”, ya que el nuevo modelo fue el octavo producido por la marca tras la Segunda Guerra Mundial, así como el octavo modelo Skoda con la suspensión independiente de última tecnología adoptada por el fabricante en 1933.
La primera versión de dos puertas del Skoda Octavia salió de la planta principal de Mladá Boleslav en enero de 1959 – junto a sus predecesores S 440 y S 445 durante las primeras semanas. Bajo el capó, el Octavia equipaba un robusto motor de cuatro cilindros con capacidad de 1,1 litros, que generaba 29,4 kW (40 CV) e impulsaba las ruedas traseras con una transmisión de cuatro velocidades. La velocidad punta era de 110 km/h, y el consumo medio era de 7,7 litros de gasolina cada 100 kilómetros. El diseño atractivo y fluido de la carrocería era tan impresionante como su conducción. Las innovaciones técnicas, incluyendo el eje frontal con muelles de compresión y estabilizador de la barra de torsión, dieron al Octavia un alto grado de confort y un manejo fácil. La introducción de faros delanteros asimétricos en 1959 aumentó su seguridad activa. Skoda también presentó una variante más potente en 1959, el Octavia Super, equipado con un motor de 1,2 litros y una entrega máxima de 33 kW (45 CV). La demanda de la gama Octavia aumentó fuertemente, tanto en casa como fuera.
El 10 de marzo de 1960, durante el Salón del Automóvil de Ginebra, se estrenó el deportivo Skoda Octavia Touring Sport (TS), con una potencia de 37 kW (50 CV). Skoda solicitó el ingreso en la Federación Internacional del Automóvil (FIA) para la homologación del TS para participar en carreras y rallyes en la categoría de coches de calle sin modificar – allanando así el camino del modelo de dos puertas y velocidad superior a los 130 km/h en competición. Con victorias de categoría en las ediciones de 1961, 1962 y 1963 del famoso Rally de Montecarlo, el Octavia TS volvió a casa con un ‘hat-trick’.
El 11 de septiembre de 1960, Skoda presentó por primera vez el Octavia Combi en Brno, equipado con una portón trasero de dos piezas dividido horizontalmente. A pesar de sus dimensiones exteriores compactas, el vehículo tenía capacidad para acoger cómodamente a 5 pasajeros, así como un maletero de 690 litros con una longitud de carga de 0,965 metros. Tras inclinar los respaldos de asientos posteriores, la capacidad del maletero aumentaba hasta los 1.050 litros.
La berlina de dos puertas siguió fabricándose hasta 1964; el último ejemplar – un Octavia Super de color gris – salió de la cadena de montaje de Mladá Boleslav el 11 de abril. El nuevo Skoda 1000/1100 MB, con carrocería autoportante y motor trasero, tomó el relevo como su sucesor directo. El último modelo familiar Octavia salió de la planta de Kvasiny el 21 de diciembre de 1971. Entre 1959 y 1971, se produjeron un total de 360.000 Skoda Octavia, de los que 54.000 correspondieron a versiones familiares.
El robusto y fiable Octavia también proporcionó la base técnica para el primer automóvil producido en Nueva Zelanda en 1966: el Trekka fue desarrollado en estrecha colaboración con el fabricante checo y construido sobre un chasis acortado del Octavia Super. El popular vehículo utilitario es hoy considerado como uno de los predecesores de los actuales modelos SUV de Skoda.
Con el estreno del primer Octavia moderno, el nombre del modelo se convirtió en sinónimo de toda la marca. En 1992 – poco después de que Skoda uniera sus fuerzas con las del Grupo Volkswagen – empezó el trabajo de desarrollo de un modelo completamente nuevo basado en la legendaria denominación. Sobre una plataforma técnica moderna, el Director de Diseño Dirk van Braeckel y su equipo crearon una carrocería de diseño inconfundible. La berlina Octavia, con un portón trasero de grandes dimensiones, se estrenó el 4 de abril de 1996 y fue inmediatamente aclamado internacionalmente debido a su alto nivel de seguridad activa y pasiva. También disponía de un maletero de entre 528 y 1.328 litros de capacidad. El Octavia Combi, que era incluso más espacioso y tuvo especial éxito en los mercados europeos, fue añadido a la gama en marzo de 1998; la primera versión con tracción total se lanzó en 1999. En noviembre de 2017, se habían producido 970.000 berlinas con portón y más de 470.000 coches familiares de la primera generación del Octavia.
Este éxito fue superado por la segunda generación del Skoda Octavia, que se fabricó entre 2004 y 2013: 1,6 millones de berlinas y 900.000 modelos familiares fueron vendidos. Además de un su creciente valor como utilitarios, esta generación equipaba numerosas innovaciones técnicas, incluyendo motores de gasolina con inyección directa y caja de cambios automática de doble embrague DSG. Hoy, la tercera generación del Octavia forma la espina dorsal de la gama Skoda. Se produce desde noviembre de 2012, y fue completamente actualizada en febrero de 2017. Más de 2,5 millones de clientes han optado ya por esta generación.
Hace tiempo que el Skoda Octavia está firmemente consolidado en numerosos mercados. Así lo demuestra el hecho que casi 6,5 millones de Octavia hayan sido fabricados desde 1959. Además de la planta principal de Skoda en Mladá Boleslav, el Octavia también sale de las cadenas de montaje en China, India, Rusia, Kazajistán y Argelia.