Un informe insta al Ejecutivo de Camberra a intervenir el mercado de exportaciones para evitar riesgos "sustanciales" a la seguridad energética
Australia afrontará una escasez de gas en 2023, según un informe publicado este lunes por el ente regulador del país oceánico, que instó al Ejecutivo de Camberra a intervenir el mercado de exportaciones para evitar riesgos "sustanciales" a la seguridad energética.
El informe de la Comisión Australiana de Competencia y Consumo (ACCC, siglas en inglés) indicó que pese a que "Australia es un país con recursos de gas relativamente abundantes", se prevé que su costa este, en donde vive más de la mitad de la población, experimente en 2023 un déficit del suministro gasístico de 56 petajulios.
Esta cifra, que si confirmada supondrá el déficit más alto desde 2017 y que equivale a alrededor del 10 por ciento de la demanda doméstica, "supone un deterioro significativo de condiciones en relación con la previsión de 2022 (cuando se calculaba una escasez de 2 petajulios)", apunta el informe.
En el informe, la ACCC demostró preocupación por el alto nivel de concentración del mercado energético en Australia, ya que los exportadores de gas natural licuado (GNL) tuvieron el control de casi el 90 % de las reservas probadas y probables en la costa este del país en 2021.
Por ello, el regulador instó al Ejecutivo de Camberra a activar el Mecanismo de Seguridad del Gas Doméstico Australiano (ADGSM), un dispositivo legal de emergencia que permite al Ministro de Recursos intervenir directamente en el mercado y limitar las exportaciones para asegurar el abastecimiento del mercado doméstico.
"Las perspectivas del mercado del gas en la costa este han empeorado considerablemente", dijo en un comunicado la presidenta de la ACCC, Gina Cass-Gottlieb.
Según ACCC, la costa este producirá unos 1.981 petajulios de gas en 2023, de los cuales un 65,6 por ciento será exportado en virtud de los contratos a largo plazo existentes
Se prevé que los exportadores de GNL produzcan 167 peta julios por encima de lo requerido por sus compromisos contractuales, añadió el comunicado de la ACCC, al remarcar que si se dirige este excedente a destinos extranjeros se producirá una escasez de gas de 56 peta julios en la costa este australiana.