Se trata del mayor navío de la flota española en toda su historia y el primero que lleva el nombre del Monarca, y ha sido diseñado tanto para el combate como para tareas de ayuda humanitaria.
Don Juan Carlos llegó al Arsenal Militar de Ferrol unos minutos después de las diez de la mañana, vistiendo el uniforme de capitán general de la Armada, y acompañado por la ministra de Defensa, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, y la presidenta del Parlamento gallego, Pilar Rojo.
El Rey pasó revista a las tropas, presidió la firma del acta de entrega del buque de Navantia a la Armada, que lo inscribió con la numeración L-61, y asistió a la bendición del vicario episcopal de la Armada, y por último, al izado de la bandera de combate, que entregó en mano al comandante del buque, Cristóbal González-Aller Lacalle.
Chacón elogió durante el acto las cualidades del barco.