El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi ha sido declarado "en rebeldía" este martes, al no presentarse ante el tribunal de Nápoles encargado de iniciar el proceso por la compraventa de senadores, en el que 'Il Cavaliere' está acusado de pagar al senador Sergio de Gregorio para forzar la caída del Gobierno de Romano Prodi en 2008.
Berlusconi está imputado junto al exdirector del diario 'Avanti' Valter Lavitola por haber pagado supuestamente tres millones de euros entre 2007 y 2008 a De Gregorio, entonces senador de Italia de los Valores (IDV), para que pasase al centroderecha y forzase la salida de Prodi. El senador ha negociado con la Fiscalía una condena de 20 meses de prisión.
En el primer día de proceso ha causado sorpresa la decisión de Antonio di Pietro de presentarse en calidad de abogado de la formación IDV. El exsenador es uno de los principales rivales políticos de Berlusconi, forma parte de los testigos del caso y es conocido por ser instructor en los noventa del proceso 'Manos Limpias' contra la corrupción política en el país transalpino.
"Es la primera vez que me encuentro en la otra parte", ha afirmado Di Pietro al llegar al tribunal a los periodistas, ante los que también ha resaltado que "es el primer proceso con el Senado como parte civil". La decisión de la Cámara Alta fue tomada hace una semana y anunciada por su presidente, Petro Grasso, que decidió no hacer caso de la opinión expresada por el Consejo de Presidencia.
Al tribunal no han acudido ni Berlusconi ni Lavitola, imputados por corrupción, por lo que el tribunal ha decidido declarar a 'Il Cavaliere' en rebeldía. La defensa del ex primer ministro, compuesta por los abogados Michele Cerabona y Niccoló Ghedini, han argumentado no haber recibido de manera correcta las notificaciones del tribunal, que ha rechazado estas explicaciones y ha indicado que Berlusconi se ha ausentado "sin justificación".
"ERROR FATAL"
Por su parte, De Gregorio ha pedido disculpas públicamente a través del diario italiano 'La Repubblica', en el que ha reconocido haber cometido "un error fatal". "Hice algo gravísimo y he pedido perdón a Prodi, aunque sé que no es suficiente. Creía reconocerme en Berlusconi, pero me equivoqué. Ahora estoy tranquilo, he contado todo, espero que lo hagan también ellos para estar tranquilos con su conciencia", ha afirmado.
El proceso, que corre el peligro de prescribir según ha resaltado la prensa italiana, contará con los testimonios de varios políticos importantes del país, como el propio Romano Prodi, Di Pietro y los exsenadores Giuseppe Caforio (PDV) y Paolo Rossi y Finocchiaro Stamane, ambos del Partido Democrático (PD).
