La tradicional marcha berlinesa para celebrar el día del orgullo gay se inició hoy en la capital alemana con un llamado a la tolerancia por parte de su alcalde, Michael Müller.
"No podemos darle margen alguno a la discriminación y la intolerancia", dijo Müller al inaugurar la fiesta gay de la capital alemana.
"Tenemos que comprometernos todos para que la convivencia en esta ciudad sea realmente abierta, tolerante y libre", agregó el alcalde.
Müller destacó que en los últimos años se han hecho muchos progresos en cuanto a los derechos de los homosexuales pero admitió que el Christopher Street Day (CSD), como se llama la marcha, recuerda todos los años, con razón, que todavía queda mucho por hacer contra la homofobia.
La marcha ha atraído a una gran concurrencia pese a lo ocurrido anoche en Múnich, donde un hombre de 18 años dio muerte a nueve personas y luego se suicidó.
Algunos participantes dijeron que precisamente ante hechos así había que continuar defendiendo de la forma de vida de una ciudad abierta como Berlín.
Los organizadores de la fiesta, que se inició con una marcha que recorre las principales calles de la capital, esperan que en el curso de la tarde se den cita cientos de miles de personas de todo el mundo y de distintas orientaciones sexuales.
La marcha terminará frente a la emblemática Puerta de Brandeburgo, donde habrá un concierto en el que, entre otras figuras, participará Barei, última representante española en el Festival de Eurovisión.
Al final de la noche el grupo alemán de reggae y hip hop Culcha Candela estará a cargo del punto culminante del concierto.
La marcha está acompañada de un dispositivo policial con 500 agentes y hasta ahora ha transcurrido pacíficamente.