La Policía de galesa ha podido detener a un traficante de drogas gracias a una fotografía de WhatsApp que dejaba ver algo inesperado.
Resulta que el narco había compartido la foto para mostrar los productos ilegales que ofrecía, pero no tuvo en cuenta que también se veían sus manos… y sus huellas dactilares.
Cuando agentes de la policía detuvieron a un delincuente y le requisaron el teléfono se toparon casualmente con la fotografía que le había enviado el narcotraficante. Al examinarla, se dieron cuenta de que había una huella dactilar parcial.
Los policías enviaron la foto a su laboratorio forense por si se podía hacer algo. Y así fue, gracias a la foto se identificó al vendedor de droga, a su familia y colaboradores. Al final, once detenidos en una operación antidroga gracias a la fotito de marras, que iba acompañada del mensaje «¿Qué quieres comprar hoy?».
